Hormaechea amenaza al PP con dejar el Gobierno de Cantabria en manos de los socialistas

El presidente regional de Cantabria, Juan Hormaechea, confirmó ayer que dimitirá "estos días, esta semana", y explicó así su decisión: "No tengo la mayoría ni tengo porqué soportar la censura". Aunque en conversación con EL PAÍS se negó a precisar sus planes, "porque ese periódico me ataca hace muchos años y no sé por qué", poco después declaró a la agencia Europa Press que debesucederle un diputado de su partido, la Upea (Unión para el Progreso de Cantabria). De lo contrario no apoyará al candidato del PP y saldrá elegido el del PSOE, la lista más votada en las elecciones de 1991.

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El presidente regional de Cantabria, Juan Hormaechea, confirmó ayer que dimitirá "estos días, esta semana", y explicó así su decisión: "No tengo la mayoría ni tengo porqué soportar la censura". Aunque en conversación con EL PAÍS se negó a precisar sus planes, "porque ese periódico me ataca hace muchos años y no sé por qué", poco después declaró a la agencia Europa Press que debesucederle un diputado de su partido, la Upea (Unión para el Progreso de Cantabria). De lo contrario no apoyará al candidato del PP y saldrá elegido el del PSOE, la lista más votada en las elecciones de 1991.

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El presidente de Cantabria está profundamente dolido con el Partido Popular, al que acusa de utilizar la sentencia que le condena a seis años de prisión por malversación de fondos públicos para conquistar el Gobierno regional "con unos votos que no son suyos".Por eso envió ayer un mensaje inequívoco a José María Aznar. Él se va de momento, pero o el PP apoya al sucesor que designe o el Gobierno de Cantabria será para los socialistas. Además, tiene la intención de presentarse en mayo no sólo para la presidencia de la comunidad sino también para la alcaldía de Santander.

Aunque él lunes había asegurado ante los micrófonos de la Cadena SER que su dimisión dependía de negociaciones con el PP, lo que fue desmentido por el partido de Aznar, Hormaechea precisó ayer que está. en contacto con una persona cuya identidad no quiere revelar y a la que no sabe "qué significación se le concede en el PP".

Hormaechea negó haber tomado en consideración la posibilidad de unas elecciones anticipadas en enero, que deberían repetirse cuatro, meses después, si ningún candidato para sucederle obtiene mayoría simple (más votos a favor que en contra) en el plazo de dos meses y medio desde que formalice su dimisión. Aunque no lo ha confirmado públicamente, su deseo es que le suceda el diputado de la Upca y ex consejero del Gobierno autonómico Vicente de la Hera.

El presidente condenado advirtió ayer al PP que si no vota a un diputado de la Upea para la presidencia, su grupo en ningún caso apoyara al candidato de los populares, José Luis Vallines, al que acusó de intrigante. Con la abstención de los ocho diputados de la Upca, el candidato socialista, Jaime Blanco, podría obtener la mayoría simple gracias a sus 16 diputados, incluso aunque votaran en contra los otros 15 parlamentarios.

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La llave

En cambio, con el voto contrario de la Upca el candidato de los populares sólo podría salir adelante gracias a la abstención del Grupo Socialista, aunque a sus nueve escaños se sumaran los cuatro de la Unión por Cantabria y los dos del Partido Regionalista de Cantabria, que ya habían comprometido su apoyo a la moción de censura de Vallines. El partido del actual presidente, por tanto, sigue teniendo la llave, salvo pacto entre populares y socialistas, que garantiza la mayoría absoluta.

Hormaechea dio a entender que existe un acuerdo más o menos secreto para echarle del Gobierno entre el PSOE de Cantabria y el Partido Popular, que disponen en la Asamblea regional de los dos grupos parlamentarios de mayor peso. Los dos principales partidos no han entablado conversaciones formales desde la presentación de las respectivas mociones (le censura por la negativa de los populares.

La dimisión de Hormaechea pondría en marcha los mecanismos previstos en el Estatuto de Autonomía de Cantabria. El presidente de la Asamblea deberá convocar en un plazo máximo de 15 días, según el artículo 19.3 del estatuto, la sesión plenaria para la elección de nuevo presidente de la Diputación regional.

Según el artículo 16. 2 del estatuto, el presidente debe ser miembro de la Cámara regional. El presidente de la Asamblea propondrá el candidato tras consultar a las fuerzas políticas y oída la Mesa. Si el candidato no obtiene la mayoría absoluta, se repetirá la votación en 48 horas y bastará la mayoría simple. El procedimiento puede repetirse con sucesivos candidatos.

Si ninguno consigue mayoría simple en dos meses desde la primera votación de investidura, la Asamblea regional "quedará automáticamente disuelta, procediéndose a la convocatoria de nuevas elecciones para la misma". El mandato de la nueva Asamblea "durará, en todo caso, hasta la fecha en que debiera concluir el de la primera".

Hormaechea negó ayer que su dimisión busque forzar un adelanto electoral, obligado sí los grupos políticos no se ponen de acuerdo, al menos para no impedir, que otro se haga con el Gobierno regional. "No lo había pensado", declaró, para a continuación quejarse de: que mientras PP y PSOE han aprobado reformas de otros estatutos para hacer posible la disolución de las cámaras por los presidentes autonómicos, en Cantabria se bloqueó la reforma "porque el PP tenía miedo de que yo les, adelantara las elecciones", aseguró.

Fuentes cercanas a la presidencia del PP se felicitaron ayer de la decisión de Hormaechea de dimitir y consideraron que "es la mejor solución". Según el portavoz, si la dimisión se produce "se abre una situación distinta": puesto que la presidencia puede alcanzarse por mayoría simple en vez de la mayoría absoluta que exige la moción de censura.

Los populares "no apoyarán, en principio", a un candidato de la Upca y, según los análisis que ha manejado en los últimos días la dirección del partido, confían en que la retirada del presidente condenado abra fisuras en el partido que le sostiene y facilite. "la recomposición del centro-derecha".

La misma fuente insistió en que la actuación del PP desde la condena del, presidente de Cantabria ha sido correcta. "Si se va", aseguró, "será gracias a que no hemos negociado con él, hemos presentando la, moción de censura y tampoco hemos negociado con los socialistas, porque con el argumento de que había un pacto PP-PSOE se hubiera encastillado en la presidencia".

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