Valores, humanismo y Ramón Llull

La "Europa de los valores" y la cultura, con "capacidad de diálogo con otras, culturas" y que combata las "sombras grises" de la xenofobia y el racismo, la ejemplificó don Juan Carlos en Ramón Llull, patrono de la actual promoción del Colegio de Europa.Enarbolando su figura hizo un llamamiento a los intelectuales "para que aporten sus ideas y sus esfuerzos" al resurgir de esa Europa.

Llull, recordó, fue el gran filósofo y poeta medieval mallorquín que "soñó con una síntesis espiritual entre Oriente y Occidente, entre el Norte y el Sur". El escritor catalán [que, por cierto, se estudia h...

La "Europa de los valores" y la cultura, con "capacidad de diálogo con otras, culturas" y que combata las "sombras grises" de la xenofobia y el racismo, la ejemplificó don Juan Carlos en Ramón Llull, patrono de la actual promoción del Colegio de Europa.Enarbolando su figura hizo un llamamiento a los intelectuales "para que aporten sus ideas y sus esfuerzos" al resurgir de esa Europa.

Llull, recordó, fue el gran filósofo y poeta medieval mallorquín que "soñó con una síntesis espiritual entre Oriente y Occidente, entre el Norte y el Sur". El escritor catalán [que, por cierto, se estudia hoy más en Friburgo que en Barcelona o en Madrid] fue "uno de los pocos europeos de su época que hablaron y estudiaron no menos de seis lenguas , incluido el árabe, y que entendió el mundo conocido en la Baja Edad Media como casa propia recordó el Rey.

Llul constituye así para los europeos de hoy uno de los puntos de referencia entre quienes "trazaron el camino de la primera unidad europea, que fue una unidad en el espíritu y en la capacidad de poner en común experiencias culturales diversas como entramado básico para alumbrar una nueva etapa de la historia colectiva".

La figura del doctor iluminado fue antes invocada en el discurso del rector del Colegio de Europa, Gabriel Fragnière: "Para los catalanes, Ramón Llull, es el creador de su lengua; para los historia dores de la filosofía, supone un caso especial; para la In quisición, fue un herético; pero un santo para la escuela franciscana, y un gigante para los especialistas de la literatura mística. Para todo el mundo, es el autor de Ars magna ". Con esta cita de Sala-Molins, destacó que el sabio mallorquín resurge hoy como "testimonio del encuentro de tres culturas, árabe, judía y cristiana".