Clinton logra que la Cámara apruebe su ley anticrimen al segundo intento

El pleno de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó ayer el proyecto de ley anticrimen propuesto por el Gobierno, sólo diez días después de que la misma cámara baja rechazara el texto, lo que supuso un duro golpe político para el presidente Bill Clinton. Un total de 235 diputados votaron ayer a favor del proyecto y otros 195 lo hicieron en contra. En la sesión, además, fueron rechazados dos intentos de bloquear nuevamente el proyecto. El pasado 10 de agosto, el texto había sido rechazado por 225 votos en contra y 110 a favor.Clinton consiguió que la Cámara de Representantes rectif...

El pleno de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó ayer el proyecto de ley anticrimen propuesto por el Gobierno, sólo diez días después de que la misma cámara baja rechazara el texto, lo que supuso un duro golpe político para el presidente Bill Clinton. Un total de 235 diputados votaron ayer a favor del proyecto y otros 195 lo hicieron en contra. En la sesión, además, fueron rechazados dos intentos de bloquear nuevamente el proyecto. El pasado 10 de agosto, el texto había sido rechazado por 225 votos en contra y 110 a favor.Clinton consiguió que la Cámara de Representantes rectificara su decisión inicial después de alcanzar un acuerdo con los legisladores, según el cual el presupuesto destinado a la puesta en marcha de la ley ascenderá a 30.200 millones de dólares, 3.300 millones menos que en el proyecto rechazado hace diez días.

En el proyecto aprobado, sin embargo, permanece intacto el capítulo dedicado a la prohibición de vender 19 tipos de armas de asalto, punto que ha sido rechazado por el poderoso grupo de presión de la Asociación Nacional del Rifle (NRA).

La nueva ley, que ahora será debatida en el Senado, extiende la posibilidad de aplicar la pena de muerte a otros 50 tipos de delito que hasta ahora son castigados con penas de prisión. El proyecto autoriza también. el procesamiento de adolescentes con más de 13 años en las mismas condiciones que los adultos en determinados delitos, destina más de 8.000 millones de dólares para crear 100.000 nuevos centros policiales y propone gastar otros 10.000 millones de dólares en la construcción de prisiones.