Diez muertos en una república caucásica por una epidemia de cólera que amenaza con llegar a Moscú

La epidemia de cólera que estalló hace tres semanas en Daguestán, república autónoma en el Cáucaso del Norte, ha llegado en forma de casos aislados a Moscú. En Daguestán se ha cobrado ya 10 vidas y hay más de 200 casos.A mediados de julio el cólera fue llevado a Moscú por tres daguestanos que entraron en la capital rusa en uncamión con patatas. Afortunamente, este potencial foco de infección se localizó con rapidez y la enfermedad no se extendió, dijo ayer Mijaíl Narkévich, jefe del departamento de enfermedades infecciones del Ministerio de Sanidad. Uno de los tres daguestanos murió a causa de...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La epidemia de cólera que estalló hace tres semanas en Daguestán, república autónoma en el Cáucaso del Norte, ha llegado en forma de casos aislados a Moscú. En Daguestán se ha cobrado ya 10 vidas y hay más de 200 casos.A mediados de julio el cólera fue llevado a Moscú por tres daguestanos que entraron en la capital rusa en uncamión con patatas. Afortunamente, este potencial foco de infección se localizó con rapidez y la enfermedad no se extendió, dijo ayer Mijaíl Narkévich, jefe del departamento de enfermedades infecciones del Ministerio de Sanidad. Uno de los tres daguestanos murió a causa del mal.

Además del cólera traído por os caucásicos, a ocho rusos procedentes de Ruanda también se es encontró el vibrión del cólera y actualmente se encuentran hospitalizados.

El médico jefe de la capital rusa, Yevgueni Beláyev, ha dicho que la epidemia de cólera se puede extender en Moscú debido a que en sus alrededores se encuentran varios campamentos de refugiados y a los vagabundos que viven en las estaciones de trenes.

En Daguestán las autoridades han tomado una serie de medidas para impedir que el cólera siga extendiéndose, y, según las últimas informaciones, han logrado estabilizar la situación. Cinco localidades de las 44 en las que se ha detectado, este mal han sido declaradas zonas de cuarentena.

Sin embargo, las actuales medidas están lejos de las draconianas tomadas en la época soviética, cuando cordones de policías establecían un filtro rigurosísimo para localizar la enfermedad. Narkévich explicó ayer que esas costosas medidas resultaban en gran parte inútiles y exageradas y no mostró gran preocupación por el hecho de que los daguestanos sigan llevando frutas a Moscú y explicó que el vibrión del cólera sobrevive mal en la fruta y que lo más probable es que muera en el camino. En todo caso, dijo, basta con lavarla bien para que no presente peligro alguno.

Archivado En