Perforar la plaza de Oriente le costará al municipio más de 2.000 millones de pesetas

Convertir un tramo de Bailén en calle de sólo andar le costará al municipio más de 2.000 millones de pesetas. Las zanjas del túnel y el aparcamiento subterráneo dibujadas por el arquitecto Miguel de Oriol en su reforma de la plaza de Oriente cuestan, según todos los estudios técnicos, más dinero del que se puede ingresar con la venta o el alquiler de las plazas del estacionamiento. Ninguna de las seis empresas y grupos de empresas que han presentado ofertas para cambiar la imagen de la plaza, con 34 alternativas posibles, ha conseguido equiparar los gastos previstos con los ingresos.

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Convertir un tramo de Bailén en calle de sólo andar le costará al municipio más de 2.000 millones de pesetas. Las zanjas del túnel y el aparcamiento subterráneo dibujadas por el arquitecto Miguel de Oriol en su reforma de la plaza de Oriente cuestan, según todos los estudios técnicos, más dinero del que se puede ingresar con la venta o el alquiler de las plazas del estacionamiento. Ninguna de las seis empresas y grupos de empresas que han presentado ofertas para cambiar la imagen de la plaza, con 34 alternativas posibles, ha conseguido equiparar los gastos previstos con los ingresos.

Todas las constructoras que han incluido el túnel y el aparcamiento en sus proyectos técnicos solicitan ayudas superiores a los2.000 millones para aceptar el encargo municipal. El PP, pincipal promotor de la operación no se muestra sorprendido por esta reclamación: "Es algo que ya habíamos previsto, por eso este año hemos incluido en los presupuestos 500 millones para el proyecto", explicó ayer Enrique Villoria, titular de Obras, tras la apertura de los sobres con las distintas ofertas. "Pero siempre intentaremos que la reforma nos cueste lo menos posible", aclaró. En el pliego de condiciones del condiciones del concurso, la aportación municipal era tan sólo "una posibilidad" porque la intención del PP era, como en otras obras, sacar el proyecto adelante sin ningún coste.

Pago en suelo residencial

Las empresas Auxini y Lain, que se han presentado unidas al concurso, ofrecen al municipio una alternativa de pago especial: cobrarían la minuta -siempre por encima de 4.000 millones- en suelo urbano de propiedad municipal apto para construir viviendas de protección oficial o precio tasado. Este método de cobro de una de las propuestas hizo que el portavoz de IU, Paco Herrera, profetizase ayer que el PP adjudicará a dedo las obras a Lain y Auxini.

El proyecto de esta unión de empresas es, según recordó Herrera, el que más se aproxima a la idea de Miguel Oriol para la Plaza de Oriente. Los planos de Oriol fueron ofrecidos por el Gobierno municipal como referencia arquitectónica principal del concurso.

Villoria replicó al portavoz de IU: "Decir eso es una barbaridad absoluta que contrasta con la habitual seriedad del señor Herrera". El edil socialista José María de la Riva insistió que la reforma es una "agresión innecesaria" a la ciudad.

Por otro lado, las propuestas que prescinden de los agujeros -una de OCP Construcciones y otra de Obras Hidraúlicas-Termacesa- cuestan menos de 1.000 millones. Pero el concejal de Obras rebajó ayer las posibilidades de triunfo de estas ofertas que se han olvidado de enterrar el tráfico: "Recuperar la plaza y conseguir el túnel y el aparcamiento son nuestros dos objetivos", recalcó Villoria.

Las firmas más importantes de España (ver gráfico), que en cinco de las seis ofertas han formado uniones temporales de empresas, han presentado 34 variantes distintas sobre una misma idea: la reforma de la Plaza de Oriente.

Hay propuestas con túnel pero sin aparcamiento. Concursan diseños con estacionamiento pero sin paso inferior. Se han presentado ideas urbanísticas sin ningún agujero. Y hasta se ha atrevido una empresa, Huarte, a mover los caballos: presentó en el salón de tapices, donde se celebró la apertura de plicas, su maqueta donde la figura ecuestre que luce en el centro de la plaza cambia de sitio. El jardín histórico desaparece en algunos casos y cambia su imagen en otros.

El arquitecto Francisco Pol, que acudió a la cita urbanística en representación de Obras Hidraúlicas y Termac -oferta una reforma sin túnel ni aparcamiento apoyada por 200 arquitectos, entre ellos Rafael Moneo y el decano de la Escuela de Arquitectura de Madrid, Ricardo Aroca- se encontró con un defecto burocrático en su propuesta que intentará resolver en los próximos tres días para seguir dentro del concurso. "Pese a ello, nuestro proyecto es imbatible porque resuelve el problema del tráfico y el aparcamiento con menos dinero [798 millones] que el resto", explicó. Sin embargo, Pol olvidó que una de las variantes que ha diseñado OCP Construcciones no incluye la piqueta y rebaja el presupuesto a 747 millones, el más barato de cuantos compiten por las obras.

El PP ha convertido esta empresa urbanística en la apuesta principal de su primer mandato en solitario en el Ayuntamiento de Madrid. IU, que convocó un referéndum contra la iniciativa y lo ganó, y el PSOE, que ha amenazado con recurrir a la UNESCO para detener los planes de reforma de la plaza, se oponen al proyecto. La Consejería de Política Territorial no ha debatido aún la autorización o prohibición de las obras. El PP tuvo que cambiar las normas urbanísticas para permitir que las máquinas perforen el jardín histórico de la Plaza de Oriente.

Tres meses de estudio

Los técnicos del departamento municipal de Sistemas Locales (área de Obras) estudiarán las 34 alternativas de reforma de la Plaza de Oriente para remitir a sus superiores una propuesta de adjudicación. Tiene tres meses de plazo para analizar con detenimiento cada una de las ofertas.

Enrique Villoria, concejal de Obras, asegura que no habrá ningún arquitecto o historiador que intervenga en este proceso de selección. "Tan sólo Oriol [autor del primer proyecto de reforma de la Plaza de Oriente] podrá asesorar a la empresa que resulte adjudicataria de las obras", explica.

Tras la adjudicación del proyecto, el Ayuntamiento deberá aguardar el permiso de la Comunidad de Madrid para poder agujerear el jardín de la Plaza de Oriente. Su protección especial tan sólo permite una intervención urbanística cambiando las normas municipales. Algo que ya ha hecho el Gobierno del PP en el Ayuntamiento pero aún no ha autorizado el Gobierno del PSOE en la Comunidad.