Soldados amotinados asesinan al 'número dos' de Lesoto

Solemetsi Baholo, viceprimer ministro y ministro de Hacienda de Lesoto, fue asesinado ayer por soldados rebeldes en este reino enclavado en África Austral y rodeado por tierra de Suráfrica. Los soldados tomaron también como rehenes a cuatro ministros, uno de ellos hermano del primer ministro.

El propio primer ministro, Ntsu Mokhehle, pidió la intervención de Pretoria. Al parecer, los amotinados se oponen a la investigación del levantamiento militar habido hace tres meses.

"El viceprimer ministro fue asesinado por resistirse a ser capturado", aseguró una fuente diplomática. En...

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Solemetsi Baholo, viceprimer ministro y ministro de Hacienda de Lesoto, fue asesinado ayer por soldados rebeldes en este reino enclavado en África Austral y rodeado por tierra de Suráfrica. Los soldados tomaron también como rehenes a cuatro ministros, uno de ellos hermano del primer ministro.

El propio primer ministro, Ntsu Mokhehle, pidió la intervención de Pretoria. Al parecer, los amotinados se oponen a la investigación del levantamiento militar habido hace tres meses.

"El viceprimer ministro fue asesinado por resistirse a ser capturado", aseguró una fuente diplomática. En Pretoria, el ministro surafricano de Exteriores, Roelof Pik Botha, dijo estar "consternado por los acontecimientos" y anunció que no reconocería a ningún Gobierno golpista. Las fuentes diplomáticas señalaron que no había constancia de que se estuviera desarrollando un golpe en este montañoso país de 1,8 millones de habitantes y que daba la impresión de que se trataba de un motín. De hecho, los soldados amotinados liberaron a primera hora de la noche sanos y salvos a los cuatro ministros que retenían como rehenes. Ya en enero, hubo enfrentamientos entre facciones rivales del Ejército.

Un grupo de soldados fuertemente armados hacía ayer guardia junto a la residencia de Baholo, cuyas paredes aparecían ametralladas.

La ciudad de Maseru estaba ayer silenciosa y apenas circulaba gente por la calle, aunque la mayoría de las tiendas estaban abiertas.

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