La escasez de heroína dispara su previo en el mercado de los poblados chabolistas

El mercado de la heroína atraviesa un periodo de escasez y carestía. Desde hace varias semanas, los toxicómanos tienen dificultad para encontrar su dosis en La Celsa, Méndez Álvaro, plaza de España, La Rosilla, Usera y Atocha. El cerco policial impide la llegada de estupefacientes a estos núcleos. Esta situación provoca que los toxicómanos, alterados, se concentren en torno a Los Focos, en Sam Blas o en la zona de Vallecas Villa. La escasez ha disparado el precio de las papelinas, que ahora cuestan unas 1.600 pesetas, cuando hace un mes se podían adquirir por 1.000.

Juan Vicente, de 27 ...

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El mercado de la heroína atraviesa un periodo de escasez y carestía. Desde hace varias semanas, los toxicómanos tienen dificultad para encontrar su dosis en La Celsa, Méndez Álvaro, plaza de España, La Rosilla, Usera y Atocha. El cerco policial impide la llegada de estupefacientes a estos núcleos. Esta situación provoca que los toxicómanos, alterados, se concentren en torno a Los Focos, en Sam Blas o en la zona de Vallecas Villa. La escasez ha disparado el precio de las papelinas, que ahora cuestan unas 1.600 pesetas, cuando hace un mes se podían adquirir por 1.000.

Juan Vicente, de 27 años, deambulaba inquieto por los aledaños de la M-40 en el poblado de Los Focos. Tenía los ojos revueltos, el bolsillo lleno y las venas vacías. Había pasado por la plaza de España, el Bule de Vallecas y por el Cerro de la Plata y todavía no había encontrado ningún camello."La cosa está chunga, y aquí, en Los Focos, es fácil conseguir alguna papela a media tarde", explicaba mientras con su mano avisaba a una persona que parecía el suministrador de droga. En el exterior, la policía no vigilaba. El coche patrulla llevaba tres horas sin pasar.

Otro joven, que no quiso identificarse, vestido con pantalones de pana y una cazadora de cuero muy usada, aseguraba: "Ni siquiera El Chepa, un coleguilla, me ha pasado tres papelas". Las que necesita diariamente para ahogar su fuego. "Aquí, en Los Focos, seguro que encuentro. Si no, tendré que ponerme hasta el culo de anfetas, ¿sabes?", añadió.

A media tarde del pasado sábado muchos toxicómanos seguían merodeando por esta zona de chabolas de Los Focos, en el distrito de San Blas. Es su último recurso. Los agentes tienen la explicación de esta sequía. La policía señala que se han practicado numerosas detenciones, en las que se han incautado de la suficiente droga como para obligar a los toxicómanos a modificar su habitual rumbo.

Medio kilo

Según un portavoz policial, en las últimas dos semanas se ha desmantelado el suministro de La Celsa, La Rosilla y de plaza de España gracias a varias incautaciones de pequeñas cantidades que oscilaban entre los 100 gramos y el medio kilo. Los agentes confiesan que es cierto que ahora los toxicómanos tienen más problemas para buscar la droga, aunque al final la encuentren a un precio mayor.

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El Plan Regional contra la Droga tiene constancia del aumento de yonquis en el poblado de San Blas y en las zonas altas de Vallecas. Según José Luis Álvarez, cuando hay problemas de suministro, los centros de atención al drogodependiente se resienten porque aparecen numerosos jóvenes a desintoxicarse. Para el Plan Regional sobre la Droga no se ha llegado todavía hasta este extremo debido a que aún hay mercado en la zona de San Blas. En Vallecas Villa también se ha registrado un aumento de camellos en la plaza de Enrique Mesé.

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