La quimioterapia temprana es la mejor arma para aumentar la esperanza de vida en enfermos de e cáncer

La utilización de la quimioterapia inmediatamente después de la intervención quirúrgica o antes de la cirugía para intentar reducir determinados tumores es, en la actualidad, una de las armas más eficaces para aumentar la esperanza de vida del enfermo en numerosos tipos de cáncer."La cuestión fundamental en la actualidad es saber en qué momento someter al enfermo a la cirugía", explica Manuel González Barón, jefe del servicio de Oncología Médica de Centro Sanitario La Paz de Madrid. Este especialista dirigió, la pasada semana, el III Curso Internacional de Avances en Oncología, que reunió en M...

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La utilización de la quimioterapia inmediatamente después de la intervención quirúrgica o antes de la cirugía para intentar reducir determinados tumores es, en la actualidad, una de las armas más eficaces para aumentar la esperanza de vida del enfermo en numerosos tipos de cáncer."La cuestión fundamental en la actualidad es saber en qué momento someter al enfermo a la cirugía", explica Manuel González Barón, jefe del servicio de Oncología Médica de Centro Sanitario La Paz de Madrid. Este especialista dirigió, la pasada semana, el III Curso Internacional de Avances en Oncología, que reunió en Madrid a algunos de los más importantes especialistas en este campo.

"Aunque la enfermedad sea aparentemente local, pueden existir diseminaciones tumorales muy tempranas a nivel microscópico, muy difíciles de detectar", explica González Barón.

La utilización más temprana y cada vez más frecuente, gracias al descubrimiento de fármacos que permiten nuevas combinaciones terapéuticas, es el cambio más importante de los últimos años en las estrategias de tratamiento y lo que determinará los nuevos enfoques de los próximos años, según los expertos.

"Hasta hace poco, la quimioterapia se ha utilizado en enfermedades avanzadas, en las que no había otra cosa que hacer", explica Eduardo Fernández Rubio, jefe del servicio de Oncología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. "Ahora se utiliza cada vez más precozmente".

En la actualidad, el 36% de los pacientes de cáncer son sometidos desde el primer momento, antes o inmediatamente después de la cirugía, a la quimioterapia. Tarde o temprano, este tratamiento es aplicado al 60% de todos los pacientes oncológicos. En tumores avanzados, se consigue la curación definitiva en más de una decena de tipos de cáncer, entre otros leucemia, linfomas, testículos y ovarios.

La quimioterapia previa a la cirugía es una práctica asentada, por ejemplo, en los cánceres de" mama inflamatorios (cuando el tumor ha dañado gran número de vasos linfáticos). Este tratamiento inicial ha hecho también posible la cirugía en alrededor de un 10% de casos de cáncer de pulmón, antes inoperable en todos los casos, alargando y mejorando la calidad de vida del enfermo.

Utilizado inmediatamente después de la cirugía, ha conseguido aumentar entre un 15% y un 20% las probabilidades de curación (la supervivencia más allá de cinco años) en la mayoría de los tumores de mama.

Una de las líneas de investigación más importantes en la actualidad, según los especialistas reunidos en Madrid, se centra en el desarrollo de los llamados moduladores de la respuesta biológica que permiten potenciar la acción de la quimioterapia, limitando sus efectos tóxicos.

El autotrasplante de médula en tratamientos intensivos de quimioterapia permite dosis muy elevadas de fármacos en tumores muy avanzados o resistentes. El Hospital Clínico San Carlos, por ejemplo, ha realizado más de 50 tratamientos de este tipo en los dos últimos años. Sus resultados indican que en cáncer de mama este tratamiento aumenta las posibilidades de supervivencia por encima de los tres años en un 40% en tumores avanzados.

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