Suzuki no inyectará más dinero en Santana Motor, que suspende pagos

La multinacional japonesa Suzuki comunicó ayer que no inyectará más dinero en su filial española, Santana Motor, que presentó ayer suspensión de pagos. Suzuki afirmó que aportará 5.271 millones de pesetas para enjugar las pérdidas producidas hasta ahora y de este modo pasa la pelota a la Administración española. UGT sostiene que la intención de la multinacional es cerrar la factoría de Linares (Jaén), con una plantilla de 2.400 trabajadores, pero no las de Gijón y Manzanares.

El pasivo de la suspensión de pagos es de 22.669 millones de pesetas y el activo de 24.574 millones de pesetas. ...

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La multinacional japonesa Suzuki comunicó ayer que no inyectará más dinero en su filial española, Santana Motor, que presentó ayer suspensión de pagos. Suzuki afirmó que aportará 5.271 millones de pesetas para enjugar las pérdidas producidas hasta ahora y de este modo pasa la pelota a la Administración española. UGT sostiene que la intención de la multinacional es cerrar la factoría de Linares (Jaén), con una plantilla de 2.400 trabajadores, pero no las de Gijón y Manzanares.

El pasivo de la suspensión de pagos es de 22.669 millones de pesetas y el activo de 24.574 millones de pesetas. Fuentes de, Suzuki añadieron que los problemas de Santana afectan "muy gravemente a la viabilidad de la planta de fabricación de vehículos de Linares y, en considerable menor medida, a los restantes centros productivos de la compañía". No obstante, esas fuentes añaden que la empresa "continuará su plena colaboración comercial y tecnológica".Un portavoz del Ministerio de Industria afirmó que la suspensión de pagos cambia el escenario de la empresa pero el ministerio "hará los esfuerzos necesarios para dar viabilidad a la empresa". En este sentido, el ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, señaló ayer que en los próximos días se reunirá con los responsables de Santana Motor para tratar sobre la situación de la empresa e intentar salvar la producción de vehículos y la mayor parte posible de los puestos de trabajo.

En el expediente de suspensión de pagos, la empresa aduce que la actual situación es consecuencia de las condiciones internas de competitividad y productividad de la compañía y de la recesión del mercado del automóvil en Europa.

Suzuki recuerda que su posición como accionista mayoritario se deriva del hecho de que en la ampliación de capital acordada en junio de 1993, la firma japonesa fue la única que acudió a ésta y no los restantes accionistas.

El pasado mes de marzo la dirección de Santana Motor alcanzó un acuerdo con los sindicatos, con la mediación de la Junta de Andalucía, para poner en marcha un plan industrial y laboral que garantizara la viabilidad de la empresa. Sin embargo, la mayor parte de los compromisos de aquel acuerdo, cuyo objetivo era ampliar la producción hasta 50.000 vehículos por año, no se han cumplido, especialmente en lo que se refiere a la aportación de capital por parte de la firma japonesa y la Junta de Andalucía.

En estos momentos, las acusaciones entre ambos protagonistas han saltado a la palestra. Fuentes de la empresa informaron ayer que convenios y decisiones arbitrales que adoptó en marzo pasado la Junta "no deben entenderse como vinculantes" al considerar que Suzuki no participó en las negociaciones de aquel acuerdo.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) acordó ayer suspender cautelarmente la cotización en Bolsa de Santana por la suspensión de pagos. Esta empresa automovilística tiene admitidas a cotización en Bolsa 7,2 millones de acciones con un nominal de 500 pesetas cada una.

Reunión con los trabajadores

El consejero delegado de Santana Motor, Yasushisa Maeda, se puso ayer en contacto con el presidente del comité de empresa de Linares, Antonio Fernández Siles (CC OO), para convocar a los representantes de los trabajadores a una reunión que se celebrará en Madrid el próximo día 23, informa

Éste ha sido el primer contacto que se produce entre dirección y trabajadores, a los que ya se ha comunicado de forma oficial la suspensión de pagos.Unos 1.500 trabajadores de la factoría estuvieron ayer ante las puertas de Santana recabando información del comité de empresa. Con los ánimos crispados, un grupo de empleados propuso cortar la carretera situada frente a la empresa e incluso desplazarse hasta la autovía que conecta Sevilla con Madrid para impedir el paso de vehículos. Ambas iniciativas fueron abortadas por Fernández Siles, quien pidió a sus compañeros tranquilidad.

El aspirante a la secretaría general de UGT y secretario del Metal, Manuel Fernández Lito, quien se desplazó a Jaén para apoyar a los trabajadores, aseguró en una conferencia de prensa que Suzuki tiene intención de cerrar la factoría de Linares. "La intención de Suzuki no es la de marcharse de España pero sí la de cerrar Linares", aseguró Lito, quien hizo mención a la información facilitada por el ministro de Industria. En opinión del dirigente sindical, esta decisión, de llevarse a cabo, puede tener más repercusión en Linares que los efectos producidos por Seat en Barcelona.

En un intento de tranquilizar a los empleados, Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, dijo ayer en Granada que, mientras se tramita en un juzgado de Leganés la suspensión de pagos, confía en que fructifiquen los contactos entre los empleados, la empresa y las Administraciones, informa

Exigió a los responsables de Suzuki que expliquen el alcance de la crisis a los trabajadores de Linares y aclaren cuál es su verdadero futuro con vista a iniciar una negociación.Chaves, quien un día antes se reunió con el presidente de la filial española, insistió en que el Gobierno andaluz no tiene ninguna comunicación de Suzuki que confirme el cierre inmediato de la línea de producción.

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