Atraco con rehén en una oficina de ITV en Pontevedra que estaba vigilada por la Guardia Civil

Dos hombres armados con una escopeta de cañones recortados atracaron anoche una oficina de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en Barro (Pontevedra) y se llevaron como rehén a un cliente, al qué liberaron a los pocos minutos. Los asaltantes burlaron a una pareja de la Guardia Civil que vigilaba el edificio después de que éste sufriese un robo similar el pasado día 7.Según testigos presenciales, los atracadores descendieron a pie desde un monte cercano a la oficina, con el rostro cubierto por pasamontañas, pocos minutos antes de las nueve de la noche. Irrumpieron en el edificio, enc...

Dos hombres armados con una escopeta de cañones recortados atracaron anoche una oficina de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en Barro (Pontevedra) y se llevaron como rehén a un cliente, al qué liberaron a los pocos minutos. Los asaltantes burlaron a una pareja de la Guardia Civil que vigilaba el edificio después de que éste sufriese un robo similar el pasado día 7.Según testigos presenciales, los atracadores descendieron a pie desde un monte cercano a la oficina, con el rostro cubierto por pasamontañas, pocos minutos antes de las nueve de la noche. Irrumpieron en el edificio, encañonaron a un empleado y se llevaron unas 390.000 pesetas.

Cuando se disponían a huir, la Guardia Civil se percató de su presencia y les ordenó detenerse. Inmediatamente tomaron como rehén a una de las personas que se estaban en la oficina y escaparon en un automóvil propiedad de otro cliente. El edificio también estaba custodiado por un vigilante privado de seguridad, que intentó detener a los atracadores disparando su arma.

Los asaltantes huyeron a través de varias pistas forestales en dirección al vecino municipio de Vilagarcía de Arousa. En un monte liberaron al rehén, que fue encontrado poco después por la Guardia Civil preso de un ataque de nervios.

La oficina de la ITV en Barro ya fue asaltada la pasada semana a la misma hora. Uno de los empleados aseguró que presumiblemente los autores de ambos atracos eran los mismos, ya que coinciden sus características físicas y el tipo de arma utilizada. En el primer atraco el botín fue de algo más de 400.000 pesetas.