Fallaron los pacientes
Las consultas de centros de salud y de los grandes hospitales madrileños, como La Paz o el Ramón y Cajal, funcionaron con normalidad y atendieron a todos los pacientes con cita previa. Sólo algunos centros privados, como la clínica Rúber, optaron por suspender sus consultas ambulatorias. Los que fallaron fueron los pacientes. "Hoy funciona todo mucho mejor. ¡Ojalá fuera así todos los días!", comentaba una paciente en Reumatología de La Paz.De las 14 pacientes citadas en ginecología en La Paz, por ejemplo sólo acudieron seis, y únicamente se practicaron cuatro citologías de las 30 que suelen re...
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Las consultas de centros de salud y de los grandes hospitales madrileños, como La Paz o el Ramón y Cajal, funcionaron con normalidad y atendieron a todos los pacientes con cita previa. Sólo algunos centros privados, como la clínica Rúber, optaron por suspender sus consultas ambulatorias. Los que fallaron fueron los pacientes. "Hoy funciona todo mucho mejor. ¡Ojalá fuera así todos los días!", comentaba una paciente en Reumatología de La Paz.De las 14 pacientes citadas en ginecología en La Paz, por ejemplo sólo acudieron seis, y únicamente se practicaron cuatro citologías de las 30 que suelen realizarse a diario en el servicio, que funcionaba a pleno rendimiento. Al Ramón y Cajal acudió menos del 50% de los pacientes con cita previa. Las urgencias notaron también las ausencias: a las 12 de la mañana, las camas de La Paz permanecían vacías, y en el Ramón y Cajal estaban ocupadas 32 de las 90 disponibles, un 30% menos de lo habitual.