Los 'cascos azules' españoles abandonarán la zona de Bosnia bajo control musumán

Los cascos azules españoles se replegarán hacia la región de Bosnia-Herzegovina bajo control croata y serán sustituidos por tropas de Malaisia en la zona mayoritariamente musulmana, según los planes de redespliegue de fuerzas que ultima Naciones Unidas de cara al invierno.Los planes de la ONU suponen que la zona de responsabilidad española se reducirá al área que va de la frontera de Bosnia con Croacia, en MetkovIc, hasta Jablanica, a 80 kilómetros de Sarajevo, incluida la ciudad de Mostar y el cuartel general español de Medjugorje.

Por el contrario, la zona bajo control de la Armija, c...

Los cascos azules españoles se replegarán hacia la región de Bosnia-Herzegovina bajo control croata y serán sustituidos por tropas de Malaisia en la zona mayoritariamente musulmana, según los planes de redespliegue de fuerzas que ultima Naciones Unidas de cara al invierno.Los planes de la ONU suponen que la zona de responsabilidad española se reducirá al área que va de la frontera de Bosnia con Croacia, en MetkovIc, hasta Jablanica, a 80 kilómetros de Sarajevo, incluida la ciudad de Mostar y el cuartel general español de Medjugorje.

Por el contrario, la zona bajo control de la Armija, con ejército mayoritariamente musulmán y leal al Gobierno bosnio, desde Jablanica hasta Kiseljak, en las afueras de Sarajevo, pasará a ser responsabilidad del contingente de 1.500 cascos azules de Malaisia, cuya llegada a la antigua Yugoslavia está prevista para las próximas semanas.

La división de la actual zona española entre el batallón español y el malaisio supondrá, con toda probabilidad, el traspaso de la base de Jablanica del primero al segundo. España ya intentó hace algunos meses retirar sus tropas de dicho campamento, pero la ONU se negó a aceptarlo con el argumento de que Jablanica constituye un nudo de comunicaciones esencial para el suministro de ayuda humanitaria al centro y norte de la república. La llegada del contingente malaisio permitirá realizar esta retirada sin que el campamento de Jablanica quede abandonado.

Comparecencia en el Congreso

En principio estaba previsto que las tropas de Malaisia se ubicaran en Tuzla, al norte de Sarajevo, pero finalmente se ha optado por emplazarlas en la parte alta del valle del Neretva. El reparto de zonas se ha hecho siguiendo criterios religioso-culturales: los españoles, católicos, operarán en la región bajo dominio croata; mientras que los malaisios, islámicos, lo harán en la región de hegemonía musulmana.

La ruptura de la alianza entre croatas y musulmanes, en abril, que ha convertido la ruta del Neretva en línea de frente entre ambos, hace que el batallón español sea insuficiente para mantenerla abierta, como consiguió el pasado invierno, y que la ONU haya considerado prioritario reforzarla con un nuevo contingente. Los primeros militares malaisios han empezado ya sus misiones de reconocimiento en la zona.

En Jablanica han muerto dos de los 10 cascos azules españoles fallecidos en la antigua Yugoslavia. Los 120 miembros del destacamento español, situado en un antiguo campo de fútbol , han pasado semanas enteras dentro de los refugios excavados en el subsuelo, mientras los proyectiles croatas disparados contra Jablanica sobrevolaban el campamento. Tres granadas cayeron en la base española el pasado 30 de julio, causando la muerte de un soldado y heridas a otros 17.

Los 9.000 militares de la ONU en Bosnia-Herzegovina, bajo el mando del general belga Francis Briquemont, se han visto reforzados en las últimas semanas con la llegada de un batallón sueco, con cuartel en Vares.

Además de los 1.500 cascos azules malaisios, está prevista la llegada a medio plazo de contingentes de Holanda, Bangladesh y Pakistán. Por el contrario, se han retirado la compañía logística francesa y parte del equipo sanitario británico. Las tropas de Malaisia constituirán el primer contingente no occidental desplegado en Bosnia-Herzegovina.

Los ministros de Exteriores y Defensa, Javier Solana y Julián García Vargas, comparecerán hoy en el Congreso para explicar la situación en la antigua Yugoslavia y, especialmente, las acciones de la Unión Europea por conseguir el libre paso de la ayuda humanitaria y un acuerdo global de paz para la región.