La única empresa de reciclaje de aceites en España, al borde del cierre

Según los folletos de las campañas medioambientales institucionales, los aceites de automoción se consideran agentes altamente contaminantes y peligrosos para el ser humano y para el medio ambiente, con el peligro añadido de que no se degradan jamás. Desde hace dos años, Ulibarri Piqsa, la única empresa de todo el territorio español que se dedicaba a reciclar aceite usado para su nueva comercialización, se encuentra en suspensión de pagos. El cierre parece inminente en los próximos días.Ante esta situación, más de la tercera parte de los 120 trabajadores de esta empresa de Arganda del Rey (26....

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Según los folletos de las campañas medioambientales institucionales, los aceites de automoción se consideran agentes altamente contaminantes y peligrosos para el ser humano y para el medio ambiente, con el peligro añadido de que no se degradan jamás. Desde hace dos años, Ulibarri Piqsa, la única empresa de todo el territorio español que se dedicaba a reciclar aceite usado para su nueva comercialización, se encuentra en suspensión de pagos. El cierre parece inminente en los próximos días.Ante esta situación, más de la tercera parte de los 120 trabajadores de esta empresa de Arganda del Rey (26.500 habitantes), han constituido una asamblea permanente que permanece encerrada en la fábrica desde hace ocho días. "No sólo reclamamos los salarios pendientes de los últimos cuatro ineses", afirma Pedro Gallego, miembro del comité de empresa. "También estamos luchando por la continuidad de la actividad. Queremos que la administración proporcione la infraestructura legal necesaria para que empresas como la nuestra, que es capaz de reciclar al año 40.000 toneladas de aceite de las 250.000 que se producen en España, sean viables".

Esta empresa, fundada en 1963 y que formó parte del monopolio de Campsa durante muchos años, vio suspendidas a principios de año todas sus subvenciones (según sus trabajadores han recibido del Ministerio de Obras Públicas (MOPT) 1.200 millónes en los tres últimos años), debido a ciertas irregularidades en el pago de las cuotas de la Seguridad Social de los empleados y a la suspensión de pagos que arrastra la empresa desde septiembre de 1991. Según el asesor legal de la empresa, Rafael Rivero, el MOPT no pagó íntegramente el valor de las subvenciones de los tres últimos años, adeúdando a Ulibarri unos 600 millones.

Compraventa

El 27 de mayo, Fernando Sanz y Donato de la Peña, los antiguos propietarios, vendieron la empresa a Arvelis S A. Desde entonces, la fábrica está paralizada. Pedro Gallardo afirma que el consejero de Economía de la Comunidad, José Luis Fernández Noriega, se ha comprometido a investigar las posibles irregularidades en la compraventa de la empresa.Agustín Pinel, representante legal de los propietarios de Arvelis, Salvador Lázaro y Salvador Flores, afirma que la intención es reflotar la empresa. "Para ello", afirma Pinel, "será necesario una reducción de plantilla que afectará a la mitad de los trabajadores". También afirmó que las mensualidades adeudadas se pagarán la próxima semana.

Los trabajadores afirman que Ulibarri-Piqsa puede competir en calidad con las grandes empresas que comercializan aceite de automoción. Pero no-en precio: "No podemos vender por encima de las 28 o 30 pesetas el kilogramo de aceite, el precio que marcan los grandes", afirma otro miembro de la asamblea permanente, "y a la vez, nadie nos trae el usado a menos de ocho pesetas". Los márgenes de beneficio para un empresario son demasiado estrechos.

La Cruz Roja y el Ayuntamiento de Arganda, a través de Asuntos Sociales, están proporcionando una ayuda para las familias en situación más crítica, y los empleados municipales del Ayuntamiento organizan colectas para ayudar a los empleados.

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