Ejecutados siete fundamentalistas en Argelia

Siete fundamentalistas fueron ejecutados ayer en Argel, después de haber sido declarados culpables de participar en el atentado con bomba perpetrado el año pasado en el aeropuerto de Argel, en el que murieron nueve personas y más de 120 resultaron heridas. El ministro de Justicia, en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias, afirmó que sus peticiones de clemencia habían sido rechazadas.

Entre los ejecutados se encontraba Rachid Hachaichi, un veterano piloto de las líneas aéreas estatales Air Argelia, y el conocido líder de el Movimiento Armado Islámico, Mansuri Mel...

Siete fundamentalistas fueron ejecutados ayer en Argel, después de haber sido declarados culpables de participar en el atentado con bomba perpetrado el año pasado en el aeropuerto de Argel, en el que murieron nueve personas y más de 120 resultaron heridas. El ministro de Justicia, en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias, afirmó que sus peticiones de clemencia habían sido rechazadas.

Entre los ejecutados se encontraba Rachid Hachaichi, un veterano piloto de las líneas aéreas estatales Air Argelia, y el conocido líder de el Movimiento Armado Islámico, Mansuri Meliani. Formaban parte de un grupo de 38 fundamentalistas condenados a muerte, 26 de ellos en rebeldía, por el tribunal especial de Argel el pasado 26 de mayo. En las declaraciones del ministro de Justicia no se menciona lo que ha ocurrido con los otros cinco fundamentalistas, que estaban bajo custodia desde que fue dictada la sentencia.

Por otro lado, la policía argelina informó ayer que dos policías y cinco civiles -un campesino, un comerciante, un albañil, un anciano y un empleado municipal- fueron asesinados por presuntos terroristas integristas en las últimas 48 horas. La policía no ha precisado ningún detalle sobre los móviles de los asesinatos, cuyos objetivos serían apoderarse de armas de caza, castigar a colaboradores del régimen o exigir el impuesto islámico (extorsión para financiar la bandas armadas integristas).

Los extremistas emplean también el chantaje contra empresas y medios de transporte: el domingo fue incendiada la sede de la Empresa Nacional de Canalización en Baraki, un suburbio al este de Argel, y en Blida, a 50 kilómetros al sur de Argel, fueron quemados 17 autocares y tres camiones de otra empresa estatal.