Industria reactiva las negociaciones para vender FESA-Enfersa a la firma estadounidense Freeport

El acuerdo para rescindir 1.497 empleos en FESA-Enfersa permite reactivar las negociaciones para la venta de] grupo. Sin embargo hay idos opciones posibles, la de la estadounidense Freeport Mac Moran y la de la marroquí Office Cherifien des Phosphastes (OCP), con las que existen firmados sendos preacuerdos para que se queden con la mayoría. El Gobierno español, que interviene en las negociaciones a través del secretario de Estado de Industria, Álvaro Espina, se inclina por Freeport. OCP insiste en su interés por el grupo, del que es suministrador e importante acreedor.

Las olas firmas p...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El acuerdo para rescindir 1.497 empleos en FESA-Enfersa permite reactivar las negociaciones para la venta de] grupo. Sin embargo hay idos opciones posibles, la de la estadounidense Freeport Mac Moran y la de la marroquí Office Cherifien des Phosphastes (OCP), con las que existen firmados sendos preacuerdos para que se queden con la mayoría. El Gobierno español, que interviene en las negociaciones a través del secretario de Estado de Industria, Álvaro Espina, se inclina por Freeport. OCP insiste en su interés por el grupo, del que es suministrador e importante acreedor.

Las olas firmas pueden, sin embargo, acabar de socios en FESA-Enfersa. Para dar más posibilidades a la opción defendida por la Administración española se están estudiando diversas modalidades que permitan que Freeport asuma la gestión, aunque en un primer momento no tome la mayoría del capital de FESA, y que OCP participe en el accionariado desde una posición no dominante, según han asegurado fuentes de Ercros. Freeport asumiría en tomo al 55%.H.ace sólo unas semanas, los responsables de Ercros habían optado por entregar la mayoría a OCP, a fin de despejar las incógnitas financieras sobre la empresa, cuando faltaban pocos (lías para que se levantara la suspensión de pagos. OCP es una empresa controlada por el Gobierno del Reino de Marruecos, que ya le ha otorgado los correspondientes permisos autorizando su desembarco en FESA-Enfersa. Las aspiraciones marroquíes pueden verse definitivamente truncadas con el nuevo intento de compra por parte de Freeport, provocado, en gran parte, por la Administración española. El martes, con Álvaro Espina como anfitrión, se reúnen en Madrid, el presidente de Ercros, Josep Piqué, y el de Freeport en España, Ron Cramer.

"En realidad, OCP está interesada en que FESA-Enfersa siga siendo un comprador de su producción de fosfatos, para lo que estaba dispuesta a adquirir la mayoría si fuera necesario, pero no tiene interés en gestionar la sociedad", han señalado fuentes próximas a Josep Piqué, presidente de Ercros. Estas mismas fuentes señalan que el interés de la Administración "se centra en que sea Freeport quien asuma el control de la gestión industrial, aunque en un primer momento su participación accionarial en FESA-Enfersa no sea mayoritaria".

En cualquier caso, los responsables de Ercros y FESA-Enfersa insisten en que la empresa necesita -tras haber conseguido levantar la suspensión de pagos gracias a una reducción de la deuda de 102.000 millones de pesetas- un nuevo socio de inmediato, a fin de garantizar la continuidad de sus actividades. "Si Freeport desea entrar en FESA-Enfersa debe decidirlo antes del mes de julio", apuntan algunas fuentes.

FESA-Enfersa ya ha preparado un complejo proyecto de creación de una nueva sociedad que asumiría las ramas de actividad y los activos industriales de la actual, que está pendiente de su aprobación por la comisión de seguimiento que garantiza el cumplimiento de las condiciones pactadas en el convenio de acreedores.

Un nuevo esquema

Con la financiación procedente del Instituto de Crédito Oficial (ICO) por importe de 8.500 millones de pesetas -cuya concesión sólo está pendiente de que exista un nuevo socio que asuma la gestión-, la nueva sociedad adquiriría esos activos a la vieja, que, a su vez, los emplearía para pagar la rescisión de contratos de los 1.500 trabajadores excedentes.Paralelamente, se han iniciado los contactos para negociar la cobertura del fondo del complemento de pensiones del personal pasivo de la empresa. El déficit de este fondo se estima en 28.000 millones de pesetas.

Archivado En