Regatee, por favor

Un turista que quiera disfrutar del verano de la villa puede pagar menos por el alojamiento que por la cena en un restaurante mediano. Y no se trata de que acabe en una pensión o de que duerma sobre el banco de un parque. Puede pasar unos días en un buen hotel a precios módicos.La crisis ha desatado una guerra de precios en los hoteles madrileños, especialmente en los de tres y cuatro estrellas. Para atraer la demanda, se multiplican los incentivos. "Regatee, por favor", es el mejor consejo. "Y si va usted en grupo, mejor", podría añadirse. Una de las batallas más importantes en esta guerra es...

Un turista que quiera disfrutar del verano de la villa puede pagar menos por el alojamiento que por la cena en un restaurante mediano. Y no se trata de que acabe en una pensión o de que duerma sobre el banco de un parque. Puede pasar unos días en un buen hotel a precios módicos.La crisis ha desatado una guerra de precios en los hoteles madrileños, especialmente en los de tres y cuatro estrellas. Para atraer la demanda, se multiplican los incentivos. "Regatee, por favor", es el mejor consejo. "Y si va usted en grupo, mejor", podría añadirse. Una de las batallas más importantes en esta guerra es la que con siste en conseguir grupos de clientes (más de 15 personas, generalmente).

Este periódico ha comprobado cómo los precios para contratar una veintena de habitaciones dobles para los próximos días bajan siempre si se insiste un poco. Por ejemplo, en el hotel Sol Galgos (calle de Claudio Coello) pasaron de un precio inicial para grupo de 19.000 pesetas a 14.000 más desayuno. La habitación doble normal cuesta 22.500.

Los precios han registrado en estos experimentos una reducción de entre un 40% y un 60% sobre la cantidad inicial. Y si el grupo hace el viaje en los meses de verano (julio, agosto y septiembre), hay aún más alicientes, como la inclusión del desayuno o de los impuestos (el 6% de IVA) en el precio total. Eso ofrece, por ejemplo, el hotel Castellana Inter-Continental (en la Castellana).

En otros casos, tras el regateo, el departamento de reservas del hotel puede llegar a aceptar el presupuesto que los posibles clientes quieran desembolsar. O tal vez ofrece incentivos de este tipo: "Cada 20 personas, una gratis", como es el caso del hotel Claridge (plaza del Conde de Casal).

Así las cosas, una habitación doble en el Tryp Plaza (plaza de España), de cuatro estrellas, cuyo precio normal ronda las 23.000 pesetas por noche, puede llegar a salir por 14.500 en una oferta por grupo, y esta cantidad se queda en unas 9.000 durante el verano.