Extranjeros, perros, gatos y otros animales

La fea costumbre de ducharse en calzoncillos, practicada por algunos inmigrantes en los baños públicos, retrasa la deseable armonía entre los inmigrantes y los ciudadanos japoneses. El ministro de Justicia tuvo que intervenir recientemente para que los propietarios de numerosas casas de baño retirasen la prohibición de entrada a los no japoneses,Los dueños de estos establecimientos afirman que la clientela nacional huye despavorida cuando peones del sureste asiático rompen con el exquisito protocolo higiénico nipón -primero ducha y después bañera- y se zambullen en las tinas comunitarias enjab...

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La fea costumbre de ducharse en calzoncillos, practicada por algunos inmigrantes en los baños públicos, retrasa la deseable armonía entre los inmigrantes y los ciudadanos japoneses. El ministro de Justicia tuvo que intervenir recientemente para que los propietarios de numerosas casas de baño retirasen la prohibición de entrada a los no japoneses,Los dueños de estos establecimientos afirman que la clientela nacional huye despavorida cuando peones del sureste asiático rompen con el exquisito protocolo higiénico nipón -primero ducha y después bañera- y se zambullen en las tinas comunitarias enjabonados y en paños menores de jornada intensiva. Muchos de los fugitivos, no muy versados sobre las vías de propagación de la enfermedad, sospechan que en la muda anida el virus del sida.

En el alquiler de viviendas se observa también una creciente discriminación. Un agente inmobiliario colocó en el escaparate de su oficina esta advertencia: "No extranjeros, perros, gatos u otros animales".

La percepción negativa de lo extranjero es frecuente en un pueblo tan homogéneo, racial y culturalmente, como el japonés. El antropólogo John Russell recuerda en uno de sus libros que las actitudes racistas hacia los negros se remontan al siglo XVII, cuando los africanos formaban parte de las tripulaciones holandesas y portuguesas desembarcadas en puertos nipones. Las crónicas de la época se despachaban a gusto con la marinería negra. Russell piensa que, para los japoneses, todas las mujeres latinoamericanas bailan la lambada y no existe clase media entre los negros.

"Es cierto que hay entre nosotros una sensación de superioridad y la creencia de que los extranjeros nunca llegarán a entendernos. En nuestros padres, esta forma de pensar nacionalista está mas arraigada" reconoce Chiharu Nishio, intérprete en un programa de televisión sobre España.

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