El Papa ordena a las carmelitas dejar el convento de Auschwitz

El Papa Juan Pablo II ha ordenado a las carmelitas trasladar el convento del antiguo campo de exterminio nazi de Auschwitz "a otro sitio", en una carta del sábado hecha pública ayer por el se cretariado del episcopado polaco, según la agencia PAP. "Ahora, por voluntad de la Iglesia", dice la carta, "debeis trasladaros a otro sitio, siempre en Oswiecim [nombre polaco de Auschwitz]. Cada una de vosotras es libre de elegir continuar su vida de carmelita en la misma comunidad o regresar a su convento originario. Es sin duda un momento de prueba para cada una".La publicación de la carta papal suced...

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El Papa Juan Pablo II ha ordenado a las carmelitas trasladar el convento del antiguo campo de exterminio nazi de Auschwitz "a otro sitio", en una carta del sábado hecha pública ayer por el se cretariado del episcopado polaco, según la agencia PAP. "Ahora, por voluntad de la Iglesia", dice la carta, "debeis trasladaros a otro sitio, siempre en Oswiecim [nombre polaco de Auschwitz]. Cada una de vosotras es libre de elegir continuar su vida de carmelita en la misma comunidad o regresar a su convento originario. Es sin duda un momento de prueba para cada una".La publicación de la carta papal sucede en vísperas del 50 aniversario de la insurrección del gueto de Varsovia contra los ocupantes nazis. La celebración reunirá el próximo día 19 a varios miles de judíos en la capital polaca, y varios líderes judíos habían amenazado con boicotear las ceremonias si las carmelitas no abandonaban Auschwitz.

El Vaticano, por medio de su .portavoz, Joaquín Navarro-Valls, dijo ayer que "el contenido de la carta es amistoso y no una orden de abandonar el convento", y que indica a las monjas que "ahora que un nuevo convento se ha edificado, podeis mudaros cuando querais".

El antiguo convento carmelita se halla adosado a los muros del que fuera campo de exterminio nazi, y los líderes judíos lo ven como intrusión en un lugar sagrado del Holocausto: en Auschwitz se cree murió más de millón y medio de prisioneros, la mayoría judíos.

La polémica de las carmelitas de AuschwItz conoció una intensa fase en 1989, al penetrar un grupo judío en el convento, aduciendo que el edificio contravenía el acuerdo de 1987 entre la Iglesia católica y las organizaciones judías. El primado de Polonia, cardenal Glemp, protestó contra la incursión.

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