'Matasentencias' no conoce a Andreotti

"Nunca he frecuentado a Salvo Lima ni a Giulio Andreotti, con el que únicamente he coincidido en alguna ceremonia pública", ha manifestado Corrado Carnevale, el juez Matasentencias, como le llaman los periódicos italianos, investigado por haber favorecido a la Mafia. "Si alguien ha hecho creer que tenía enchufes romanos bien conectados con el Palacio de Justicia, no tengo nada que ver con el asunto. Nadie se ha permitido pedirme que interviniera en favor de personas relacionadas con la delincuencia", afirma Andreotti.Carnevale, siciliano, de 63 años, es, en cualquier caso, todo u...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

"Nunca he frecuentado a Salvo Lima ni a Giulio Andreotti, con el que únicamente he coincidido en alguna ceremonia pública", ha manifestado Corrado Carnevale, el juez Matasentencias, como le llaman los periódicos italianos, investigado por haber favorecido a la Mafia. "Si alguien ha hecho creer que tenía enchufes romanos bien conectados con el Palacio de Justicia, no tengo nada que ver con el asunto. Nadie se ha permitido pedirme que interviniera en favor de personas relacionadas con la delincuencia", afirma Andreotti.Carnevale, siciliano, de 63 años, es, en cualquier caso, todo un paradigma del sistema italiano en violenta crisis. Entre junio de 1986 y septiembre del pasado año, como presidente de la sección penal del Tribunal de Casación, anuló 500 sentencias confirmadas en dos instancias previas, ahorrando largas penas de cárcel a criminales como Michele Greco o Raffaele Cutolo.

Nunca hizo nada ilegal, aunque escandalizó permanentemente a los italianos. Carnevale actuó, en efecto, a la luz del día y más bien con un exceso de celo jurídico que lo contrario.

Por ejemplo, el año pasado, puso en libertad a Alfredo Bono, un peligroso enlace entre las Mafias de Sicilia y Estados Unidos, porque la policía no había comunicado la fecha de su primer interrogatorio a uno de sus dos abogados.

El arrepentido Gaspare Mutolo ha dicho que era una "marca de garantía" para la Mafia. Leonardo Messina, otro mafioso, ha confirmado que hubiera debido reducir a una cazzata (una chorrada) la sentencia del maxiproceso de Palermo. Pero esto no fue posible porque, cuando la revisó la casación, en enero de este año, Carnevale había sido ya trasladado a la sección civil del tribunal.

Previamente, en 1991, el Gobierno de Andreotti impidió por decreto que pusiera en libertad a los grandes capos condenados en Palermo. Y Salvo Lima fue asesinado por el descontento de la Mafia en torno a todo ésto, según ha dicho Mutolo. Los jueces quieren saber, no obstante, si hubo algo entre Andreotti, Lima y Carnevale, antes de 1991.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En