La lira, cada vez más lejos del SME

Cuando, en el mes de septiembre, Italia anunciaba la salida de lalira del Sistema Monetario Europeo (SME), día.s después de una devaluación del 6%, su primer ministro, Giuliano Amato, afirmaba que su divisa volvería a la disciplina monetaria europea a los pocos días, en cuanto se estabilizara el SME. Pero hoy, seis meses después de aquel fatídico miércoles negro, nadie apuesta ni 100 liras (en la actualidad, 7,5 pesetas) por su reincorporación al mecanismo de cambios comunitario.Desde que el Gobierno de Italia dejó flotar su moneda, la lira se ha devaluado cerca de un 25% frente al marc...

Cuando, en el mes de septiembre, Italia anunciaba la salida de lalira del Sistema Monetario Europeo (SME), día.s después de una devaluación del 6%, su primer ministro, Giuliano Amato, afirmaba que su divisa volvería a la disciplina monetaria europea a los pocos días, en cuanto se estabilizara el SME. Pero hoy, seis meses después de aquel fatídico miércoles negro, nadie apuesta ni 100 liras (en la actualidad, 7,5 pesetas) por su reincorporación al mecanismo de cambios comunitario.Desde que el Gobierno de Italia dejó flotar su moneda, la lira se ha devaluado cerca de un 25% frente al marco alemán y más de un 30% respecto al dólar norteamericano. Los expertos financieros consideran, además, que, aunque los indicadores fundamentales de la economía italiana y la esperada decisión del Bundesbank (banco cenfral alemán) de rebajar sus tipos de interés el pasado jueves deberían elevar la cotización de la lira, los escándalos políticos actuales la llevarán más abajo todavía en su paridad frente al resto de las monedas europeas.

Fabio Luca Cavazzi, un conocido estudioso de la política y la economía italianas, declaraba esta semana a EL PAÍS, tras presentar su libro La reconquista de Italia, que no se puede esperar ayuda exterior para salir del atolladero. "Estamos más solos que nunca", afirmaba; "lo que hay que hacer en Italia, sólo lo podemos hacer los italianos". Y, desgraciadamente, el clima general entre los hombres de negocios consultados es de pesimismo. El SME está hoy mucho más lejos que aquel 17 de septiembre en que la lira lo abandonó.