Renuncia el obispo más popular de Holanda, acusado de homosexual

Rudolf Bär, obispo de Rotterdam (Holanda) desde 1983, acaba de presentar su dimisión y se ha recluido en la abadía benedictina belga de Chevetogne, en las Ardenas. La versión oficial de la marcha alude a su salud y a una ansiedad que precisa atención médica y calmantes. Sin embargo, su renuncia parece estar relacionada con las reiteradas acusaciones de homosexualidad vertidas contra él.

La precipitada salida del obispo adquiere tintes de renuncia forzada por los sectores católicos más conservadores de Holanda. Un influyente grupo contrario a este prelado, de 64 años, al que consider...

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Rudolf Bär, obispo de Rotterdam (Holanda) desde 1983, acaba de presentar su dimisión y se ha recluido en la abadía benedictina belga de Chevetogne, en las Ardenas. La versión oficial de la marcha alude a su salud y a una ansiedad que precisa atención médica y calmantes. Sin embargo, su renuncia parece estar relacionada con las reiteradas acusaciones de homosexualidad vertidas contra él.

La precipitada salida del obispo adquiere tintes de renuncia forzada por los sectores católicos más conservadores de Holanda. Un influyente grupo contrario a este prelado, de 64 años, al que consideran demasiado popular y avanzado. Además, las alusiones a su presunta homosexualidad han enfrentado en los tribunales a la cadena católica de televisión KRO y a la dirección de Gay Krant, publicación editada por dicha comunidad en el país.El propio Bär ha reconocido al matutino holandés De Volkskrant que ha sido presionado para dimitir. En una conversación telefónica desde las Ardenas, señala además que, ante la avalancha de rumores caída sobre él, "lo mejor es renunciar como sucede con los hombres de Estado". Ha negado, eso sí, haber sido objeto de un chantaje directo con la publicación de documentos supuestamente comprometedores sobre su intimidad sexual. De todos modos, dichas insinuaciones le han impedido seguir al frente del obispado. "Ahora que ya me he ido, ruego, por favor, que cesen", ha dicho.

Rudolf Bär nació en las islas Célebes (Indonesia) cuando éstas eran una colonia holandesa. Su adolescencia se vio truncada por la II Guerra Mundial y estuvo en un campo de. concentración para hombres dirigido por los japoneses tras la invasión nipona del archipiélago, en 1942.

Influencia

Presentado al principio de su carrera como un hombre muy fiel a Roma, ha mostrado con el tiempo un carácter abierto al diálogo con los sectores católicos más liberales. En los últimos tiempos se había mostrado partidario de la ordenación sacerdotal de hombres casados y de cierta edad (Wriprobati) para compensar la acuciante falta de vocaciones.El éxito de su último viaje a Roma, a principios de año, junto con el resto de los obispos holandeses, tuvo también amplio eco y es considerado como el punto de inflexión que ha acelerado su caída. El documento presentado ante el Papa Juan Pablo II llevaba en gran parte su sello.

En este contexto, los rumores sobre la presunta homosexualidad del obispo han sido decisivos. El último número de Gay Krant señalaba que la cadena de televisión KRO disponía de cintas con declaraciones de personas que aseguraban haber tenido relaciones con el prelado. KRO llevó el asunto a los tribunales al considerar que la revista Gay Krant sugería su implicación en la caída de Bär.

La corte ha pedido a ambas partes que solucionen entre ellas el contencioso. Gay Krant ha remitido una nota a la agencia nacional de noticias ANP, donde señala: "Si KRO, que leyó el artículo antes de su aparición, hubiera negado su contenido, no lo habríamos publicado". La cadena de televisión se ha mostrado de acuerdo con tal declaración.

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