EL SUMARIO DE FILESA

El Tribunal de Cuentas rectifica y reconoce que tenía los documentos del PSOE pedidos por el juez

El Tribunal de Cuentas certificó ayer que el PSOE le envió en su momento las cuentas anuales de los ejercicios comprendidos entre 1988 y 1991, y la "contabilidad de todas las campañas electorales celebradas en los años 1989, 1990 y 1991, así como los documentos originales acreditativos de las operaciones que figuran en dichas contabilidades". El tribunal confirmó documentalmente que el pasado 20 de noviembre remitió al magistrado encargado del caso Filesa, Marino Barbero, los "ejemplares informatizados" de las cuentas anuales y "los documentos originales acreditativos de los servicios d...

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El Tribunal de Cuentas certificó ayer que el PSOE le envió en su momento las cuentas anuales de los ejercicios comprendidos entre 1988 y 1991, y la "contabilidad de todas las campañas electorales celebradas en los años 1989, 1990 y 1991, así como los documentos originales acreditativos de las operaciones que figuran en dichas contabilidades". El tribunal confirmó documentalmente que el pasado 20 de noviembre remitió al magistrado encargado del caso Filesa, Marino Barbero, los "ejemplares informatizados" de las cuentas anuales y "los documentos originales acreditativos de los servicios de campañas celebradas en 1989, 1990 y 1991". Con este certificado, el tribunal rectifica de forma implicita un comunicado difundido una semana antes, el pasado 19 de noviembre, y en el que negaba que estuvieran en su poder los originales de la contabilidad oficial del PSOE.Este certificado, enviado a la ejecutiva socialista, da respuesta a una solicitud del secretario de asuntos económicos del PSOE, Francisco Fernández Marugán.

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El secretario de organización socialista, Txiki Benegas, señaló ayer en conferencia de prensa: "Es muy importante para nosotros este certificado, porque demuestra que decíamos la verdad y que el juez Marino Barbero debía haberse dirigido al tribunal para recabar la documentación que nos pedía, con evidente contumacia, y que no teníamos porque estaba en el Tribunal de Cuentas".

El magistrado Marino Barbero acudió el pasado día 11 de noviembre a la sede del Banco de España para requisar documentos contables y cheques relacionados con el caso Filesa. El juez remitió el mismo día el segundo requerimiento a la ejecutiva socialista para que le enviara la contabilidad original de los años comprendidos entre 1988 y 1991.

El PSOE contestó que la documentación estaba en poder del Tribunal de Cuentas, por lo que no podía dar cumplimiento a la petición. Una semana más tarde, el pasado 18 de noviembre, una comisión judicial, compuesta por el secretario judicial asignado al caso, tres inspectores fiscales y un policía, registró la sede del PSOE con una orden Judicial en la que Barbero acusaba a los socialistas de "evidente falta de colaboración".

Copias y originales

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Al día siguiente, el Tribunal de Cuentas negó que tuviera en su poder los originales contables mediante un comunicado: "Los partidos políticos únicamente envían a este tribunal copia de los registros, libros de contabilidad y documentos relativos a su actividad económico-financiera, cuyos originales han de conservar como elemento básico para su gestión y para hacer posible en todo momento el conocimiento de su situación financiera".

Este mismo día, Barbero solicitó al tribunal la contabilidad del PSOE, y el día 20, ese órgano envió al juez los documentos solicitados.

Según afirmó ayer el secretario de organización de los socialistas, si el juez les hubiera hecho caso desde el primer momento y se hubiera dirigido al Tribunal de Cuentas, hubiera obtenido la documentación que quería sin necesidad de haberse presentado en la sede del PSOE.

Sobre la rectificación implícita del Tribunal de Cuentas, el número tres socialista no quiso pronunciarse expresamente, pero afirmó: "Puede haber existido un punto en el que se ha interpretado que la información facilitada por el ordenador no era la original, pese a que nosotros decíamos que sí era la original".

Benegas reconoció que "hay dificultades jurídicas serias para personarse en la causa". "Otra cosa es que, a la vista de los recursos que presenten los dos querellados, veamos si cabe algún tipo de recurso por nuestra parte", añadió.

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