El bacilo vence al gen

El desarrollo de tratamientos contra las nuevas formas de tuberculosis puede resolverse gracias al descubrimiento de la causa de la resistencia al fármaco más popular, la isoniacida. Los bacilos de la tuberculosis han desarrollado un mecanismo de resistencia, poco corriente: se han limitado a erradicar el gen que, en circunstancias normales, las hace sensibles a los fármacos, según apuntaban el doctor Doug Young y sus compañeros del Hanimersmith Hospital de Londres en la revista Nature, el pasado 13 de agosto.El problema de la detección y el control de las formas de tuberculosis resiste...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El desarrollo de tratamientos contra las nuevas formas de tuberculosis puede resolverse gracias al descubrimiento de la causa de la resistencia al fármaco más popular, la isoniacida. Los bacilos de la tuberculosis han desarrollado un mecanismo de resistencia, poco corriente: se han limitado a erradicar el gen que, en circunstancias normales, las hace sensibles a los fármacos, según apuntaban el doctor Doug Young y sus compañeros del Hanimersmith Hospital de Londres en la revista Nature, el pasado 13 de agosto.El problema de la detección y el control de las formas de tuberculosis resistentes a los fármacos se deriva de la naturaleza del organismo, de crecimiento lento, y de falta de antibióticos alternativos. Las pruebas de diagnosis tardan entre dos y ocho semanas en aislar las bacterias de las muestras clínicas y los estudios para verificar la sensibilidad a los fármacos pueden tardar en llevarse a cabo hasta 13 semanas. Lo que más complica el problema es que la prueba epidérmica para determinar la exposición a las bacterias suele fallar en pacientes infectados por el VIH.

Más información

Archivado En