Dos hombres estafaban con carnés manipulados por ordenador

Un experto en informática y su compinche estafaron 23 millones de pesetas a, cinco entidades financieras de Madrid pidiendo créditos para comprar a plazos, valiéndose de carnés de identidad manipulados por ordenador, según la policía. Tambien tenían acceso a listados de cuentas corrientes.A primeros de julio, en la oficina de una entidad financiera se presentó un hombre. "Ustedes me han pasado un recibo en el banco de una videocárnara que yo no he comprado", les dijo. Cuando la empresa comprobó el expediente del cliente, la identidad era correcta y el número de cuenta para pasar los recibos, t...

Un experto en informática y su compinche estafaron 23 millones de pesetas a, cinco entidades financieras de Madrid pidiendo créditos para comprar a plazos, valiéndose de carnés de identidad manipulados por ordenador, según la policía. Tambien tenían acceso a listados de cuentas corrientes.A primeros de julio, en la oficina de una entidad financiera se presentó un hombre. "Ustedes me han pasado un recibo en el banco de una videocárnara que yo no he comprado", les dijo. Cuando la empresa comprobó el expediente del cliente, la identidad era correcta y el número de cuenta para pasar los recibos, también. Pero la fotografía que aparecía en la fotocopia del carné de identidad no era la suya.

Ese fue el hilo que ha llevado a la policía a detener a José Manuel Scharrf` López, de 22 años y Vicente Sánchez Carrales, de 34, como los presuntos autores de este desaguisado y varios más, que afectan a cinco financieras.

Scharrf` y Sánchez tenían acceso a un banco de datos en los que aparecían las cuentas bancarias e información sobre sus lugares de trabajo de una serie de personas. Con todo ello y adjuntando un carné de identidad manipulado por ordenador al que se le adosaba una fotografía de uno de ellos o de algún amigo o amiga, acudían a una serie de comercios y compraban a plazos aparatos de informática, o de imagen. Como es habitual, el comercio pasaba la. documentación del cliente a la financiera y cuando esta empresa empezaba a pasar recibos, el parjudicado protestaba.

Los agentes de la comisaría de Estrella se apropiaron, al detenerles, de veinte millones de pesetas en aparatos de imagen e informática y otros tres millones en efectivo. Según los agentes, este dinero provenía de la venta de los artículos haciéndose pasar por representantes de firmas informáticas.