Los agricultores discrepan sobre el corte de carreteras en la operación retorno

Las tres principales organizaciones agrarias del país -COAG, Asaja y UPA- mantienen diferencias sobre el alcance de las movilizaciones contra el Gobierno en protesta por el bajo precio de las patatas. Esta diferencia estriba en la conveniencia o no de obstaculizar la operación retorno que tendrá lugar el próximo fin de semana. Mientras tanto, ayer mismo unos 300 agricultores de la zona del Duero bloquearon la entrada de la fábrica de purés Maggi, propiedad de Nestlé.

Tras el fracaso de las negociaciones entre los sindicatos y la Administración la pasada semana para acabar con la guerra ...

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Las tres principales organizaciones agrarias del país -COAG, Asaja y UPA- mantienen diferencias sobre el alcance de las movilizaciones contra el Gobierno en protesta por el bajo precio de las patatas. Esta diferencia estriba en la conveniencia o no de obstaculizar la operación retorno que tendrá lugar el próximo fin de semana. Mientras tanto, ayer mismo unos 300 agricultores de la zona del Duero bloquearon la entrada de la fábrica de purés Maggi, propiedad de Nestlé.

Tras el fracaso de las negociaciones entre los sindicatos y la Administración la pasada semana para acabar con la guerra de la patata, ésta ha comenzado con diversas manifestaciones.De las protestas realizadas por los agricultores, la más espectacular se produjo en las cercanías de Valladolid. Unos 300 productores de patata de la zona del Duero pertencientes a COAG, UPA y Asaja, se concentraron ante las puertas de la fábrica de purés Maggi -que pertenece al grupo Nestlé- e impidieron el acceso a su interior.

Los agricultores arrojaron alrededor de 3.000 kilos de patatas ante la sede de la factoría y las incendiaron. Acto seguido se trasladaron a la sede de la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León donde prosiguieron sus protestas. Además, solicitaron una entrevista con el presidente dela Comunidad, Juan José Lucas. Al margen de estos incidentes aislados, los responsables de las organizaciones Asaja, COAG y UPA preparan otras manifestaciones más fuertes sobre las que parece no existe una posición conjunta. Todas se muestran de acuerdo en la necesidad de cortar los pasos fronterizos con Francia o el bloqueo de algunos puertos a partir de los primeros días de septiembre, pero mantienen serias diferencias sobre si las protestas deben perturbar la operación retorno que tendrá lugar el próximo fin de semana, que coincide con el término del mes de agosto.

Posturas encontradas

Fuentes de la Coordinadora de Organizaciones Agrarias (COAG) sostienen que "las protestas de los agricultores deberán ser lo más contundentes posibles para hacer ver al Gobierno que el problema exige una intervención más profunda". Para la COAG, "sólo un corte de carretaras durante la operación retorno, el cierre de las fronteras y el reparto de patatas pueden hacer variar de postura al Ejecutivo".Sin embargo, el máximo dirigente de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Fernando Moraleda, opina de otra forma. "Nuestra organización rechaza las medidas ofertadas por el Gobierno y vamos a luchar para modificarlas pero, no es de recibo mantener en sus coches durante horas a familias enteras por la reivindicación de un sector concreto de la agricultura. Quien adopte una medida así deberá afrontar las consecuencias", concluyó Moraleda.

La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) no se muestra partidaria de realizar cortes de carreteras, "aunque hemos dejado vía libre a nuestras asociaciones para que cada una obre como lo crea necesario".

La Unió de Pagesos realizará esta semana un seguimiento en la frontera de La Jonquera de las patatas importadas y anuncia "medidas más contundentes" si las entradas son masivas.

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