Renfe solicita a Hacienda 300.000 millones de pesetas para sanear sus finanzas

Renfe ha solicitado a los ministerios de Hacienda y de Obras Públicas y Transportes un plan de saneamiento financiero que asegure su futuro. Según la presidenta de la compañía, Mercè Sala, del endeudamiento total de Renfe a diciembre de 1991 (950.000 millones de pesetas), 300.000 millones "no son achacables a gestión de la compañía".

Según Sala, esos 300.000 millones de pesetas corresponden a inversiones del Estado en infraestructuras de las que se hizo cargo Renfe vía endeudamiento, a los intereses que genera la partida y al retraso en los pagos por parte de la Administración. Todo ell...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Renfe ha solicitado a los ministerios de Hacienda y de Obras Públicas y Transportes un plan de saneamiento financiero que asegure su futuro. Según la presidenta de la compañía, Mercè Sala, del endeudamiento total de Renfe a diciembre de 1991 (950.000 millones de pesetas), 300.000 millones "no son achacables a gestión de la compañía".

Según Sala, esos 300.000 millones de pesetas corresponden a inversiones del Estado en infraestructuras de las que se hizo cargo Renfe vía endeudamiento, a los intereses que genera la partida y al retraso en los pagos por parte de la Administración. Todo ello supone, según Sala, "que la dirección de Renfe carece de margen de maniobra sobre el 30% del gasto total de la empresa".La presidenta de Renfe concluyó que, en el futuro, las nuevas inversiones en infraestructura deben correr a cargo de los presupuestos y en ningún caso a cuenta de Renfe". La compañía ferroviaria, que el pasado año registró pérdidas de explotación de 55.000 millones tras recibir más de 190.000 millones en subvenciones, solicitará un aumento en las subvenciones al tráfico de cercanías -que crece a un ritmo del 30% frente al 18% previsto-; subvenciones al tráfico de trenes regionales y que el Estado se haga cargo del coste de mantenimiento de la infraestructura.

Sobre los cinco primeros meses, Mercè Sala destacó que se están cumpliendo previsiones excepto en largo recorrido que, sin considerar el AVE, ha registrado una caída de ingresos del 2,5%. Según dijo, los servicios de largo recorrido y mercancías, con déficits de 12.000 y 23.000 millones respectivamente, serán rentables en cinco años. Como parte del saneamiento, Renfe llevará a cabo un ajuste de plantilla que podría afectar a unos 3.500 empleados con medidas no traumáticas.

La presidenta de Renfe anunció que tras la muestra de la Expo, se pondrán en marcha servicios del AVE entre Ciudad Real y Madrid y Córdoba-Sevilla para compensar la previsible caída en la demanda. Mercè Sala fue menos concreta al hablar del futuro de la alta velocidad y se limitó a asegurar que Transportes mantiene contactos con el ministerio francés del ramo para crear una sociedad conjunta que conecte en alta velocidad Barcelona y Montpellier.

Archivado En