Presiones para que Mandela y el Gobierno surafricano reanuden el diálogo

Las intervenciones de todo tipo se multiplican en Suráfrica y en el extranjero para facilitar la reanudación del diálogo entre el Congreso Nacional Africano (ANC), de Nelson Mandela, y el Gobierno del presidente Frederik de Klerk, interrumpido después de la matanza, la semana pasada, de 39 residentes de un suburbio negro de Johanesburgo, Boipatong. El ANC achaca al Gobierno la responsabilidad de este asesinato colectivo.

Las imputaciones del ANC en torno a una implicación directa de las Fuerzas de Seguridad del Estado en las recientes matanzas han cobrado cuerpo al revelarse un vínculo ...

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Las intervenciones de todo tipo se multiplican en Suráfrica y en el extranjero para facilitar la reanudación del diálogo entre el Congreso Nacional Africano (ANC), de Nelson Mandela, y el Gobierno del presidente Frederik de Klerk, interrumpido después de la matanza, la semana pasada, de 39 residentes de un suburbio negro de Johanesburgo, Boipatong. El ANC achaca al Gobierno la responsabilidad de este asesinato colectivo.

Las imputaciones del ANC en torno a una implicación directa de las Fuerzas de Seguridad del Estado en las recientes matanzas han cobrado cuerpo al revelarse un vínculo entre las brutales unidades de élite, los Koevoet, utilizadas por el Gobierno de Pretoria en la guerra contra Nabimia y la actual policía, en la que han sido integrados centenares de ellos desde que en 1990 Namibia declaró su independencia.Un minero declaró a principios de esta semana que un antiguo Koevoet, que actualmente sirve cómo guardia de seguridad en una explotación minera, le confesó estar harto de matar a mujeres y niños en sitios como Boipatong. Estas revelaciones fueron puestas en conocimiento del ANC que movilizó a sus abogados en la comisión creada para investigar la reciente matanza, en la que se el Gobierno ha aceptado la participación de expertos extranjeros. Los resultados de estas pesquisas no se conocerán hasta más adelante.

A pesar de estas revelaciones el ANC parece haber suavizado su oposición categórica a reanudar el diálogo con De Klerk. Ayer, el secretario general del ANC, Cyril Ramaphosa, y el ministro de Asuntos Constitucionales del Gobierno de Pretoria, Roelf Meyer, tenían previsto ayer conversar por teléfono para organizar un encuentro entre Mandela y De Klerk, según un portavoz del ANC. Mandela canceló a último momento una gira por varias ciudades del país.

El presidente surafricano, después de reunir un Gabinete de crisis, insistió en negar cualquier responsabilidad en la matanza. "Sería una terrible tragedia el perder todo el trabajo llevado a cabo, con todo lo que hemos logrado y lo cerca que estamos de hallar una solución", añadió De Klerk.

Reivindicaciones

La organización de Mandela anunció también la presentación de una lista de reivindicaciones concretas encaminadas a poner fin a la violencia que azota a los guetos negros de las grandes ciudades, como Soweto, donde han muerto 12.000 personas de raza negra en los últimos ocho años.Los esfuerzos de mediación tienen el apoyo de la comunidad internacional, preocupada por la brusca interrupción de un diálogo esperanzador que parecía capaz de poner fin al régimen del apartheid. La reunión de la Organización de Estados Africanos (OUA) que se celebra en Dakar, en Senegal, podría servir de marco para un encuentro entre Mandela y el ministro surafricano de Exteriores, Pik Botha.

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Además, se prevé que el secretario general de la OUA, Salim Ahmed Salim, y el secretario gen eral de las Naciones Unidas, Butros Gali, se entrevisten con Mandela al margen de la reunión.

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