El Ejército recurre el fallo que absolvió a los autores de las quemaduras de un soldado
El jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), teniente general Ramón Porgueres, ha decidido recurrir ante la sala V de lo militar del Tribunal Supremo la sentencia de un tribunal militar de Valencia que absolvió el pasado lunes a un cabo y cinco soldados que quemaron a un compañero con motivo de una novatada. También el general jefe de la Capitanía de Valencia, Agustín Quesada, anunció ayer que recurrirá la sentencia, informa Francesc Bayarri. Estos dos recursos se añaden al presentado por el fiscal togado del Ministerio de Defensa.En una nota remitida a la prensa, el Ejército de Tierra...
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El jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), teniente general Ramón Porgueres, ha decidido recurrir ante la sala V de lo militar del Tribunal Supremo la sentencia de un tribunal militar de Valencia que absolvió el pasado lunes a un cabo y cinco soldados que quemaron a un compañero con motivo de una novatada. También el general jefe de la Capitanía de Valencia, Agustín Quesada, anunció ayer que recurrirá la sentencia, informa Francesc Bayarri. Estos dos recursos se añaden al presentado por el fiscal togado del Ministerio de Defensa.En una nota remitida a la prensa, el Ejército de Tierra explica que el recurso de casación se presenta con el propósito de "salvaguardar, dentro del mayor respeto a la justicia, la disciplina y otros altos valores propios de la institución" y añade que, entre estos "altos valores" figura "de forma preminente el respeto a la dignidad de la persona en los ejércitos, con independencia de su rango militar, función para la que está legitimado este mando con arreglo a la normativa vigente".
El general jefe de la región militar pirenaico oriental, Ricardo Marzo, declaró ayer a Europa Press que no está de acuerdo con la sentencia, si bien matizó que la acataba.
Las comunidades del País Vasco y Navarra cuentan, como informa Aitor Guenaga, con 1.600 insumisos, más de la mitad de los cerca de 3.000 jóvenes que se han negado a realizar el servicio militar y la prestación social sustitutoria en España, según el Movimiento de Objeción de Conciencia de Euskal Herria.