El Gobierno aprueba por sorpresa la ley de huelga dos semanas antes del 28-M

El Gobierno aprobó ayer el proyecto de ley de huelga que le confiere la última palabra sobre la fijación de servicios y agrava las sanciones por su incumplimiento. El proyecto se enviará la próxima semana al Parlamento, donde el Gobierno espera lograr el máximo consenso posible con los partidos políticos al tramitarlo como ley orgánica. El texto, acordado a sólo dos semanas de la huelga general del 28-M recoge una de las propuestas de la patronal y ninguna de los síndicatos.

La decisión de aprobarlo en vísperas de la huelga general y la falta de consenso. sindical han provocado una fuer...

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El Gobierno aprobó ayer el proyecto de ley de huelga que le confiere la última palabra sobre la fijación de servicios y agrava las sanciones por su incumplimiento. El proyecto se enviará la próxima semana al Parlamento, donde el Gobierno espera lograr el máximo consenso posible con los partidos políticos al tramitarlo como ley orgánica. El texto, acordado a sólo dos semanas de la huelga general del 28-M recoge una de las propuestas de la patronal y ninguna de los síndicatos.

La decisión de aprobarlo en vísperas de la huelga general y la falta de consenso. sindical han provocado una fuerte reacción del Partido Popular, Izquierda Unida y los sindicatos, que lo han calificado de "provocación".El proyecto incluye la petición de la CEOE de que los preavisos de huelga incluyan una descripción de las negociaciones que los sindicatos y trabajadores han realizado con anterioridad a la convocatoria de huelga. Sin embargo, el articulado nos satisface a la patronal. Su presidente, José María, manifesto ayer que le parece insuficiente una norma que "no permite organizar la huelga del día 28". La causa es que no contempla la posibilidad de la declaración previa de ilegalidad o, legalidad, de la convocatoria.

Los sindicatos UGT y CC OO reaccionaron ayer con indignación a la aprobación del anteproyecto. Lo consideran "una nueva provocación" a los sindicatos y a los trabajadores, ya que no se han aceptado sus propuestas en el proceso de consultas cerrado el lunes pasado.

El líder de UGT, Nicolás Redondo, manifestó que la nueva ley es el mayor atentado contra el PSOE y la izquierda.

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