Irak confirma el derribo de un avión iraní que se adentró en su territorio

El Ejército iraquí derribó un avión de combate F-4 iraní que se había adentrado ayer en su territorio. La agencia iraní Irna señaló que sus aviones habían penetrado en Irak en respuesta a un ataque ejecutado el sábado por el grupo opositor Muyahidin Jalq, con base en Irak, contra una población fronteriza iraní. La oposición en el exilio atacó anoche las embajadas de Irán en distintas ciudades europeas en protesta contra el ataque aéreo. Una fuente militar citada por Irna reconoció la operación de represalia contra la base del grupo armado iraní.

La oposición al régimen de Teherán hizo d...

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El Ejército iraquí derribó un avión de combate F-4 iraní que se había adentrado ayer en su territorio. La agencia iraní Irna señaló que sus aviones habían penetrado en Irak en respuesta a un ataque ejecutado el sábado por el grupo opositor Muyahidin Jalq, con base en Irak, contra una población fronteriza iraní. La oposición en el exilio atacó anoche las embajadas de Irán en distintas ciudades europeas en protesta contra el ataque aéreo. Una fuente militar citada por Irna reconoció la operación de represalia contra la base del grupo armado iraní.

La oposición al régimen de Teherán hizo desde Londres un llamamiento a sus seguidores para que atacasen las embajadas de Irán en Europa occidental después de conocer la operación de castigo. Fuentes policiales de una decena de capitales europeas informaron de numerosos asaltos en la tarde de ayer a las sedes diplomáticas, en los que se destrozaron documentos, cristales y muebles, y fueron detenidos numerosos manifestantes.En Bonn, 40 personas ocuparon durante más de una hora la embajada de la república islámica, destruyendo documentos y arrasando su interior. Durante el asalto resultó herido un número indeterminado de personas. La policía finalmente expulsó a los amotinados. En La Haya fueron detenidos 35 manifestantes, sin registrarse heridos. La representación, en Estocolmo fue atacada con bombas y resultó seriamente dañada. Incidentes similares se registraron en las embajadas de Londres, Oslo, Copenhague, Berna y París. Dos personas fueron arrestadas en Londres después de arrojar un cóctel-mólotov contra la oficina de las líneas aéreas de Irán.

La operación del Ejército de Teherán es el primer ataque aéreo perpetrado dentro del territorio de Irak desde el alto el fuego de agosto de 1988, que concluyó con ocho años de guerra entre los dos países.

Dos pilotos, identificados como Kasem Mohamed Amin y Arslan Sharifi, fueron capturados en la operación. Miembros del Muyahidin Jalq mostraron a los periodistas extranjeros los daños causados por la ofensiva iraní en la base de Ashraf, situada a 100 kilómetros de Bagdad y de la frontera iraní, así como los restos del avión F-4 derribado del Ejército iraní.

Poco antes de que el Ministerio de Asuntos Exteriores iraquí informase que fue el Ejército de Sadam Hussein el que derribó al aparato iraní, la oposición iraní en el. exilio, Muyahidin Jalq, indicaba que sus baterías antiaéreas derribaron un avión de guerra iraní cuando un grupo de 12 bombardeaba una de sus bases dentro del territorio de Irak.

La avanzadilla aérea iraní estaba integrada por ocho bombarderos que sobrevolaron la zona de Al Jales cuatro veces consecutivas. Las autoridades iraquíes enviaron un mensaje al secretario general de la ONU, Butros Gali, y otro al de la Liga Arabe, Esmat Abdel Maguid, informando del incidente.

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En el ataque aéreo murió una persona y al menos cinco resultaron heridas, según un portavoz del grupo de oposición muyahidin. Este grupo se ha atribuido dos ataques perpetrados con anterioridad contra diplomáticos iraníes destacados en Bagdad.

Sin embargo, la organización denunció ayer en un comunicado que la versión iraní era un bulo difundido para justificar el ataque aéreo contra una de sus bases establecidas en Irak.

La oposición muyahidin ha pedido a la ONU que imponga un embargo inmediato de armas y petróleo a Irán en represalia por el ataque. Fuentes oficiales muyahidines interpretan el ataque como un acto desesperado de Teherán para ganarse el favor de los votantes en las elecciones parlamentarias que se celebran el próximo viernes.

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