Cuatro muertos y un herido grave al estallar un taller pirotécnico en las proximidades de Valencia

Cuatro personas murieron ayer a causa de la explosión de un taller pirotécnico en la localidad valenciana de Turís. Al cierre de esta edición, un herido se encontraba en estado crítico. Otras cinco personas presentaban quemaduras y contusiones menores. La Pirotecnia Turís, SL, que había superado todas las inspecciones, estalló a las 15.45. Una carcasa salió despedida hacia un pinar cercano y originó un incendio. Las causas del siniestro aún se investigan. Las víctimas mortales son Pedro Moreno, Juan Bautista Añón, Salvador Chuflá y una mujer marroquí llamada Zaida. Éste es el accidente más gra...

Cuatro personas murieron ayer a causa de la explosión de un taller pirotécnico en la localidad valenciana de Turís. Al cierre de esta edición, un herido se encontraba en estado crítico. Otras cinco personas presentaban quemaduras y contusiones menores. La Pirotecnia Turís, SL, que había superado todas las inspecciones, estalló a las 15.45. Una carcasa salió despedida hacia un pinar cercano y originó un incendio. Las causas del siniestro aún se investigan. Las víctimas mortales son Pedro Moreno, Juan Bautista Añón, Salvador Chuflá y una mujer marroquí llamada Zaida. Éste es el accidente más grave ocurrido en un taller pirotécnico en la Comunidad Valenciana.

Los cuatro fallecidos eran trabajadores de la empresa y se encontraban cargando material pirotécnico en tres vehículos para las fiestas de las Fallas, que ayer iban a comenzar en Turís, a unos 25 kilómetros de Valencia. Tres de las víctimas fallecieron en el acto. Cuatro heridos fueron trasladados a la Unidad de Quemados La Fe, de Valencia, donde uno de ellos, Pedro Moreno, murió hacia las 20 horas.Un médico explicó que otro de los ingresados, Antonio García, de 24 años, presentaba quemaduras en el 90% del cuerpo, por lo que podía fallecer en las siguientes horas. Un tercer quemado, Francisco Reyes, únicamente tenía afectado el ocho por ciento de la piel. Otro lesionado fue dado de alta tras ser reconocido en La Fe.

El taller fue fundado en 1984 por Vicente Cervera. En agosto de 1991, cambió de titullaridad y se transformó en Pirotecnia Turís, SL. La empresa había pasado todos los controles legales. La última revisión de Industria data del 18 de julio de 1991. También un informe de la Guardia Civil de mayo del pasado año dio el visto bueno al taller. La empresa está clasificada como de segunda categoría y emplea a una decena de personas.

Fuentes de la patronal señalaron que la empresa siniestrada es de tipo medio, aunque exportaba parte de su producción. Los sindicatos UGT y CC OO coincideron en criticar la falta de control efectivo por parte de la Administración. Según UGT, la legislación que rige el sector es obsoleta y no se cumplen las medidas de seguridad. CC OO recordó que Pirotecnia Turís, SL, había experimentado un rápido crecimiento en los últimos años.

Carmen Crespo, una secretaria de 23 años de edad, se encontraba trabajando en. la pirotecnia cuando se produjo' una explosión que hizo desaparecer la industria por completo. Según cuenta su marido, José Miguel Camañes, Carmen se escondió bajo la mesa de su escritorio cuando escuchó un fuerte estallido, informa

. "Vio una nube blanca y, rodeada de escombros, salió por un agujero. Entonces vio a Miguel, uno de los empleados, quien, ensangrentado, gritaba: ¿Quién se ha salvado?".Sin embargo, la mirada de Simeón Ballester, el encargado del taller de pirotecnia, era trágica. Estaba ayudando a la titular del juzgado número 2 de Requena, que se negó a decir su nombre, a identificar a los fallecidos. Ballester, al que todos daban por muerto en los primeros momentos, llevaba dos días de baja por enfermedad. "Dios mío, no sé que ha podido pasar", acertó a decir.

Los trabajadores de la pirotecnia estaban cargando los camiones que iban a llevar al pueblo para festejar las Fallas, que comenzaron anoche, como es tradicional, ya que en este municipio se celebran con una semana de retraso, según manifestó Gaspar Guaita, uno de los propietarios del taller, que también salió ileso de la explosión. Gaspar vagaba anoche por el lugar de los hechos. "Se ha trastornado", comentaban los compañeros. Éste es el accidente más grave ocurrido en un taller pirotécnico. En mayo de 1986, cuatro jóvenes murieron al estallar un taller ilegal en Moncada, pero no hubo heridos.

Los siniestros más sangrientos se han registrado fuera de los talleres. La explosión que causó más muertos fue la del hipermercado Pryca de San Juan, en Alicante, donde un automóvil cargado de material pirotécnico estalló en 1989 y provocó nueve muertos y 25 heridos. Seis personas fallecieron en El Campello (Alicante) en octubre de 1987 al explotar una caja con pólvora durante una fiesta de Moros y Cristianos.