Asalto a la guardería

La hija de Boyer desaloja el centro al que acude la hija de Aranzadi

Laura Boyer Arnedo, de 26 años, hija del ex ministro Miguel Boyer y la ginecóloga Elena Arnelo, podrá vivir en la casa situada en el número 17 de la calle de Jorge Manrique, después de que una sentencia ordenase el desalojo de la guardería Casazul, enclavada allí. Una docena de policías hicieron cumplir el lunes y ayer la orden judicial de desalojo. Entre los niños de esta guardería figura Itziar Aranzadi, de año y medio, hija de Claudio Aranzadi, ministro de Industria, según afirmó una de las profesoras. Para el desalojo no hizo falta cumplir el decreto Boyer, sino sólo la ley de Arrendamient...

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Laura Boyer Arnedo, de 26 años, hija del ex ministro Miguel Boyer y la ginecóloga Elena Arnelo, podrá vivir en la casa situada en el número 17 de la calle de Jorge Manrique, después de que una sentencia ordenase el desalojo de la guardería Casazul, enclavada allí. Una docena de policías hicieron cumplir el lunes y ayer la orden judicial de desalojo. Entre los niños de esta guardería figura Itziar Aranzadi, de año y medio, hija de Claudio Aranzadi, ministro de Industria, según afirmó una de las profesoras. Para el desalojo no hizo falta cumplir el decreto Boyer, sino sólo la ley de Arrendamientos Urbanos.

Los padres clamaban airados ayer que sus hijos "no son muebles", al escuchar el relato de uno de ellos sobre una peregrinación telefónica para que alguna de las tres administraciones se ocupase de los críos, con escasos resultados.La guardería Casazul estaba en Jorge Manrique desde 1975. En este periodo se labró una buena fama entre sus clientes (muchos de ellos diplomáticos, políticos y familias de clase alta). Encarnación Paz Muro, de 60 años, regentaba el local, que acogía a 43 niños de edades comprendidas entre dos y cuatro años.

La policía desalojó el lunes la casa cuando los niños estaban dentro. Los profesores consiguieron que no se enterasen de lo que sucedía de la verja para fuera, adonde -desde las diez de la mañana hasta las cinco de la tarde- acudieron los padres alarmados.

Paz Muro se hizo un corte profundo en la nariz al chocar con una puerta de cristales, entre los nervios del desalojo.

La sentencia que ordena abandonar el lugar tiene fecha 17 de enero y falla a favor de Laura Boyer por la circunstancia de necesidad de vivienda, según confirmó ayer su abuelo.

Juan José Arnedo, de 75 años, niega ser propietario de la que hasta anteayer fue la guardería Casazul. "Hace seis años doné esta casa a mi nieta Laura. Esta donación se hizo pagando a Hacienda".

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165.000 pesetas

Arnedo afirmó que su nieta ha reclamado la casa "sencillamente porque quiere trasladarse desde Miami a Madrid para vivir cerca de su familia y su entorno". Tan cerca que en los dos chalés colindantes viven él y su hija Elena.La directora de la guardería señaló que Arnedo ha pleiteado sucesivas veces con ella, "por algún impago". El alquiler que se pagaba era de 165.000 pesetas mensuales.

Una profesora, la cocinera y una amiga de Paz Muro transportaban ayer en coches particulares vajillas, fotos, ficheros, juegos, papeles... Hacia el mediodía, el conductor de un camión de mudanzas voceó a los policías: "¡Vengo a hacer un desahucio!". Este camión se llevaba los muebles a los depósitos municipales del que fue el mercado de frutas de Legazpi. Trini, una madre, intentaba por todos los medios que dos canes no acabasen en la perrera municipal.

"Son demasiadas cosas las que hay dentro, después de 17 años", se lamentaba Manoli Molero, que trabajaba en Casazul desde hace 11 años. En la acera quedaban señales de que allí hubo niños hasta el lunes: ceras, cromos de animales y alguna cuartilla con garabatos de colores. Hasta algún zapato que se cayó del ropero.

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