Juicio contra dos médicos del Severo Ochoa por la muerte de una enferma

Dos médicos del hospital Severo Ochoa de Leganés -R. M. I. y G. O. F.- van a ser juzgados por una supuesta negligencia profesional que, presuntamente, ocasionó la muerte de Domitila García Valbuena. Según el abogado de la familia, que reclama a ambos médicos una indemnización de 50 millones, los errores en los diagnósticos facilitados por M.I. y O. F. propiciaron la muerte de Domitila García nueve días después de que la paciente acudiera por primera vez, aquejada de un fuerte dolor, al servicio de urgencias.El abogado de la familia relata en su informe que la paciente, que murió como consecuen...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Dos médicos del hospital Severo Ochoa de Leganés -R. M. I. y G. O. F.- van a ser juzgados por una supuesta negligencia profesional que, presuntamente, ocasionó la muerte de Domitila García Valbuena. Según el abogado de la familia, que reclama a ambos médicos una indemnización de 50 millones, los errores en los diagnósticos facilitados por M.I. y O. F. propiciaron la muerte de Domitila García nueve días después de que la paciente acudiera por primera vez, aquejada de un fuerte dolor, al servicio de urgencias.El abogado de la familia relata en su informe que la paciente, que murió como consecuencia de una "peritonitis virulenta", se presentó en las urgencias del hospital el 2 de febrero de 1988, y que la doctora que la asistió le diagnosticó una infección de orina, sin hacerle ninguna exploración previa, y la envió a su casa.

Este abogado agrega que horas después, al persistir el dolor, Domitila García volvió a urgencias, siendo tratada por el otro médico encausado, quien le diagnosticó un cólico nefrítico. En esta segunda ocasión también fue remitida a su casa.

El 6 de febrero de 1988, Domitila García regresó nuevamente al hospital, donde fue operada sin dilación de un cuadro de apéndice perforada. Finalmente, el día 10 falleció como consecuencia, según el parte médico, de una peritonitis perforada. El fiscal considera que ambos médicos no han cometido ningún delito.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En