El juez acusa a los abogados de dilatar el proceso del fraude de la Seguridad Social

Á. P La Audiencia de Barcelona ha dictado un auto sobre el caso del fraude de la Seguridad Social en el que expresa su "estupefacción" por las maniobras que están realizando los abogados de algunos de los acusados para dilatar y retrasar el proceso judicial. Este fraude, descubierto en 1982 y en el que están implicadas un centenar de personas, en su mayoría empresarios, está pendiente aún de juicio.

La opinión de la Audiencia está recogida en un auto en el que se desestima un recurso de queja interpuesto por los letrados de una treintena de empresarios al no haberles notificado que el s...

Á. P La Audiencia de Barcelona ha dictado un auto sobre el caso del fraude de la Seguridad Social en el que expresa su "estupefacción" por las maniobras que están realizando los abogados de algunos de los acusados para dilatar y retrasar el proceso judicial. Este fraude, descubierto en 1982 y en el que están implicadas un centenar de personas, en su mayoría empresarios, está pendiente aún de juicio.

La opinión de la Audiencia está recogida en un auto en el que se desestima un recurso de queja interpuesto por los letrados de una treintena de empresarios al no haberles notificado que el sumario se había transformado en un procedimiento tras la reforma Múgica. "Se está entorpeciendo el avance del procedimiento con recursos que bajo la apariencia del ejercicio de derecho de defensa buscan la dilación de este proceso", señala el auto.

Este comportamiento parece indicar, a juicio de la Audiencia, que algunos acusados "pretenden eludir la acción de la justicia", advierte el tribunal. Ello supondría, además, que se estaría atacando "de forma directa" el derecho constitucional de los acusados de tener un proceso sin dilaciones indebidas. La resolución insinúa que los abogados podrían cometer un delito de estafa y otro de prevaricación al considerar que "no es creíble que su actuación sea gratuita durante tanto tiempo". El gabinete de abogados de Juan Piqué Vidal lleva la defensa de un buen número de los implicados.

Este fraude fue descubierto hace 10 años, cuando la Inspección de Trabajo de Barcelona descubrió un "agujero" de 3.600 millones de pesetas por las liquidaciones que las empresas enviaban a Hacienda al falsear la cotización de los trabajadores.