Las empleadas de hogar

Los trabajadores-as estamos viviendo una época difícil, principalmente a causa del paro, que se ceba en un sector concreto. Numerosas trabajadoras que en otro tiempo no pensarían trabajar de empleadas de hogar hoy se ven obligadas a ello para sacar adelante a sus familias.Pero este hecho da lugar a una sobreabundancia de mano de obra que lleva a muchas personas a aprovecharse de las circunstancias. Cada vez se ofrecen a estas empleadas sueldos más pequeños, y, si no aceptan, hay muchas otras esperando para ocupar el puesto. Se están dando casos muy tristes y escandalosos. Escandaloso es...

Los trabajadores-as estamos viviendo una época difícil, principalmente a causa del paro, que se ceba en un sector concreto. Numerosas trabajadoras que en otro tiempo no pensarían trabajar de empleadas de hogar hoy se ven obligadas a ello para sacar adelante a sus familias.Pero este hecho da lugar a una sobreabundancia de mano de obra que lleva a muchas personas a aprovecharse de las circunstancias. Cada vez se ofrecen a estas empleadas sueldos más pequeños, y, si no aceptan, hay muchas otras esperando para ocupar el puesto. Se están dando casos muy tristes y escandalosos. Escandaloso es que a una empleada se le pague poco y mal (no cumpliendo la legalidad vigente) y además se le ofrezca como limosna lo que se le debe en justicia. Escandaloso es que no cumplan con el derecho que tienen a ser aseguradas y con la jornada laboral establecida, obligándoles a realizar muchísimas más horas que las marcadas por la ley. Escandaloso es que a una trabajadora se le despida por caer de baja por enfermedad o maternidad, o por casarse, dejándola en la más absoluta miseria económica y personal. Dándose la paradoja de que una familia (normalmente católica) que se siente muy orgullosa de lo que ayuda a los pobres, o una familia (progre y demócrata de toda la vida) que se siente muy orgullosa de lo solidaria que es con la sociedad estuviesen ambas haciendo un pobre en su hogar.

Es absolutamente imprescindible concienciar a la sociedad de que una empleada de hogar es una trabajadora más, y que quien la emplea es un patrón más.-