Reformar media Constitución

El Parlamento belga aprobó, antes de su disolución, el mes pasado, un programa para reformar prácticamente la mitad de los artículos de la Constitución, lo cual da a la nueva legislatura un carácter constituyente. El Gobierno que se forme necesitará un respaldo de dos tercios de los votos de la Cámara y el Senado para sacar adelante las reformas.Las querellas entre flamencos y valones forzaron la dimisión del anterior Gobierno y la convocatoria de elecciones anticipadas. Esas mismas diferencias entre las comunidades pueden convertir otra vez el objetivo de "federalización total" en una asignat...

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El Parlamento belga aprobó, antes de su disolución, el mes pasado, un programa para reformar prácticamente la mitad de los artículos de la Constitución, lo cual da a la nueva legislatura un carácter constituyente. El Gobierno que se forme necesitará un respaldo de dos tercios de los votos de la Cámara y el Senado para sacar adelante las reformas.Las querellas entre flamencos y valones forzaron la dimisión del anterior Gobierno y la convocatoria de elecciones anticipadas. Esas mismas diferencias entre las comunidades pueden convertir otra vez el objetivo de "federalización total" en una asignatura pendiente, puesto que hará falta reunir en coalición al menos seis o siete partidos para alcanzar la mayoría de votos suficientes. Después de las anteriores elecciones, en 1987, hicieron falta 143 días para poder formar Gobierno.

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El proceso federal se inició en Bélgica hace dos décadas, pero resta por hacer una tercera fase de la reforma dirigida a transferir totalmente a las comunidades las competencias del Estado en materia de seguridad social, agricultura y comercio exterior, incluida la firma de acuerdos internacionales. Los Gobiernos regionales y comunitarios pasarán a ser elegidos directamente y gozarán de más poderes. Se someterá a revisión el sistema bicameral y se reducirá el número de ministros. El proyecto incluye extender a radio y televisión la libertad de prensa, que la Constitución hoy por hoy sólo reconoce a los medios de información en letra impresa.

Entre la lista de artículos a revisar figura el 69, que confiere al rey la capacidad de promulgar y sancionar las leyes. Se trata de evitar una crisis institucional como la generada el 4 de abril de 1990, tras la negativa del rey Balduino, por razones de conciencia, a firmar la ley que despenalizaba parcialmente el aborto. La solución entonces fue la dimisión durante dos días del monarca, para permitip a las cámaras decidir como si él no existiera.

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