Bugno conquistó la Clásica de San Sebastián

El italiano Gianni Bugno ratificó su clase con una victoria sin discusión en la San Sebastián-San Sebastián, la única carrera española que figura en el calendario de clásicas de la Copa del Mundo. Bugno ganó con 55 segundos de ventaja sobre Pedro Delgado, que estuvo en plan Chiapucci durante toda la carrera. Siempre muy activo, el corredor español se destacó en los últimos kilómetros de un grupo de seis corredores que trataban de cazar a Bugno. Induráin entró en un cuarto grupo, sin apenas aparecer en las posiciones de cabeza durante todo el recorrido.

Una vez más, la subida a Jaizkibel...

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El italiano Gianni Bugno ratificó su clase con una victoria sin discusión en la San Sebastián-San Sebastián, la única carrera española que figura en el calendario de clásicas de la Copa del Mundo. Bugno ganó con 55 segundos de ventaja sobre Pedro Delgado, que estuvo en plan Chiapucci durante toda la carrera. Siempre muy activo, el corredor español se destacó en los últimos kilómetros de un grupo de seis corredores que trataban de cazar a Bugno. Induráin entró en un cuarto grupo, sin apenas aparecer en las posiciones de cabeza durante todo el recorrido.

Una vez más, la subida a Jaizkibel sentenció la prueba. El pasado año, Induráin selló su victoria con un ataque que descolgó a Lejarreta. En esta ocasión, Bugno atacó en tres ocasiones. Chiapucci y Delgado le resistieron en los dos primeros intentos de despegue, pero en el tercero se fue con una gran facilidad. Por detrás, Delgado trató de contactar, pero sus intentos fueron inútiles.Bugno acudía a la clásica guipuzcoana en un excelente estado. El corredor italiano se ha establecido como un ciclista integral, capaz de manejarse en las grandes vueltas y en las carreras de una jornada. Su repertorio también es amplio: es capaz de montar un ataque, en el llano y en la montaña, y nadie la discute un gran oficio en las etapas contra el cronómetro. Además es un ciclista de largo aliento, o al menos de los que brinda juego durante todo el año.

Como era previsible, organizó toda su estrategia en la ascensión a Jaizkíbel. Hasta dicho punto, la carrera había pertenecido al holandés Dekker, protagonista de una larguísima escapada que le habla llevado a contar con más de diez minutos sobre el pelotón. Sin embargo, todos los ciclistas llegaron juntos al inicio del puerto, de 400 metros de altitud. El inicio de la ascensión sirvió para desmembrar al paquete y dejar en cabeza a los más fuertes.

Fueron una vez más los italianos los encargados de dinamitar la carretera. Después de varios años de ciclismo especulativo, Italia ha descubierto la emoción de la agresividad. Bugno fue el pasado año el autor de este cambio de mentalidad. Su impresionante temporada ha sido calcada este año por Claudio Chiapucci y Franco Chiccioli, e incluso por un grupo de corredores que tienen más limitaciones en las grandes pruebas por etapas, caso de Moreno Argentin y Maurizio Fondriest.

Los sucesivos ataques de Bugno en la escalada fueron contestados por Chiapucci, un ciclista impagable por su capacidad para dotar de tensión a las carreras. En este formato estuvo Delgado, que apareció innumerables veces durante la prueba. En Jaizkíbel superó a su modelo, Chiapucci, con varios. ataques, respondidos oportunamente por los favoritos. Entre todos, Bugno siempre pareció el más cómodo sobre la bicicleta. Su ataque final no encontró respuesta de nadie. Miguel Induráin nunca figuró en los puestos de batalla, y dejó el papel de activista a Delgado, que mantuvo su guerrilla hasta al meta.

Por Jaizkíbel, Bugno pasó con 25 segundos de ventaja sobre Delgado y el primer grupo de perseguidores. La historia dicta que el primero en el puerto tiene todos los boletos para conseguir la victoria, sobre todo si es un hombre acreditado en la lucha contra el cronómetro. Los últimos 30 kilómetros se organizan de esta forma: un ciclista corona Jaizkíbel y entabla una batalla contra el reloj. Si es solvente, ganará, como sucedió ayer con Bugno.

Académico

El italiano estuvo en su estilo académico, siempre natural sobre la bicicleta, poco agobiado por el intento de caza que habían montado siete corredores: Fondriest, Cenghialta, Ugrumov, Gastón, Jalabert, Dellon y Delgado. De hecho la diferencia del italiano creció progresivamente, mientras Delgado sacudía el pequeño grupo con continuos tirones. En el último de ellos, a tres kilómetros de la meta, se despegó definitivamente. Cazar a Bugno era imposible pero reavivar su prestiglio dentro de la jerarquía ciclista es importante en estos momentos para el ciclista español. Tercero fue el italiano Fondriest, quien se coloca a la cabeza de la Copa del Mundo.Clasificaciones: 1º Gianni Bugno (Italia). 2º Pedro Delgado (España), a 54 segundos. 3º Maurizio Fondriest (Italia), a 1.13 minutos. Jalabert (Francia), mismo tiempo. 5º Iñaki Gastón (España), mismo tiempo. 6º Delion (Francia), mismo tiempo.

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