ESPACIO

Los tripulantes del 'Columbia', convertidos en cobayas humanos

El astronauta Francis Gaffney despegó el pasado miércoles a bordo del transbordador Columbia, de la NASA, con un tubo de plástico metido en una vena del brazo y un sensor hasta los vasos sanguíneos cerca de su corazón para estudiar los efectos del despegue y la falta de gravedad durante las primeras horas de vuelo sobre el cuerpo humano.

Ése es uno de los 18 experimentos básicos que realizarán durante nueve días los siete astronautas, tres de los cuales son mujeres, para investigar la pérdida de células óseas y sanguíneas, la náusea, la desorientación y otras reacciones del organismo en...

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El astronauta Francis Gaffney despegó el pasado miércoles a bordo del transbordador Columbia, de la NASA, con un tubo de plástico metido en una vena del brazo y un sensor hasta los vasos sanguíneos cerca de su corazón para estudiar los efectos del despegue y la falta de gravedad durante las primeras horas de vuelo sobre el cuerpo humano.

Ése es uno de los 18 experimentos básicos que realizarán durante nueve días los siete astronautas, tres de los cuales son mujeres, para investigar la pérdida de células óseas y sanguíneas, la náusea, la desorientación y otras reacciones del organismo en el espacio. Se trata de la tercera misión de la NASA en 1991, y en esta ocasión el transbordador lleva en la bodega un laboratorio médico en el que se harán experimentos tambIén con 29 ratas y 2.478 medusas.A Gaffney le quitó el tubo de plástico otro de los médicos, de la misión durante el primer día de vuelo y se lo volverán a instalar a su regreso para estudiar los procesos de readaptación a la gravedad terrestre.

Los astronautas realizarán experimentos espectaculares nunca antes efectuados, como consumir sustancias marcadoras para seguir el flujo de fluidos en sus cuerpos, lo que permitirá evaluar los cambios químicos en su sangre y orina, o respirar mezclas gaseosas para ver el funcionamiento de los pulmones.

De los 18 experimentos de la misión, 10 están directamente relacionados con el cuerpo humano se han incluido esta vez tres mujeres, la participación femenina más numerosa hasta ahora en un vuelo espacial, para que los resultados que se obtengan sean aplicables en materias muy específicas a futuros astronautas de ambos sexos. Por primera vez se van a obtener en el espacio imágenes de ecocardiogramas del corazón mediante ondas ultrasónicas, de manera que su funcionamiento se podrá ver en un monitor de vídeo. Cada día se realizarán seis pruebas cardiológicas. "Estos experimentos permitirán, medir los cambios en el momento en que ocurren durante toda la misión, incluyendo los nueve minutos de transición a la microgravedad inmediatamente posteriores al despegue", ha explicado Arnauld Nicogossian, director de las investigaciones de ciencias de la vida de la NASA. "Es el laboratorio médico más completo que ha volado en el espacio hasta la fecha".

El principal objetivo de la misión es seguir desde el inicio del vuelo la respuesta del cuerpo humano al espacio estudiando de forma continuada los cambios biomédicos que ocurren durante el despegue, el vuelo y el retorno.

Al final del vuelo, cuatro de los astronautas permanecerán durante una semana en un. centro especial para ser sometidos a estudios minuciosos de readaptación a la gravedad y cualquier cambio psicológico causado por la permanencia de nueve días en el espacio. También se realizarán investigaciones psicológicas sobre las reacciones humanas en condiciones de vuelo espacial.

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