El Gobierno asume que el problema de la vivienda es prioritario, pero enmienda el plan del PSOE

El presidente del Gobierno, Felipe González, ha decidido "compartir" con el PSOE la prioridad de acometer un plan que facilite el acceso a la vivienda en España, pero ha enmendado, los medios que dirigentes socialistas promotores de la idea habían propuesto para materializarlo. En una nota oficial del Ejecutivo difundida tras el Consejo de Ministros se descarta acudir a 12,1 vía de coeficientes específicos de la banca para facilitar la concesión de los créditos baratos propuestos por los socialistas. Carlos Solchaga, titular de Economía, aseguró en la reunión del Gabinete que sus críticas al p...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El presidente del Gobierno, Felipe González, ha decidido "compartir" con el PSOE la prioridad de acometer un plan que facilite el acceso a la vivienda en España, pero ha enmendado, los medios que dirigentes socialistas promotores de la idea habían propuesto para materializarlo. En una nota oficial del Ejecutivo difundida tras el Consejo de Ministros se descarta acudir a 12,1 vía de coeficientes específicos de la banca para facilitar la concesión de los créditos baratos propuestos por los socialistas. Carlos Solchaga, titular de Economía, aseguró en la reunión del Gabinete que sus críticas al plan de viviendas del PSOE eran conocidas previamente por el jefe del Ejecutivo y que contaba con la autorización de González para expresarlas.

Más información

El jefe del Ejecutivo ha optado por una solución que, en principio, no desautoriza ni a la Ejecutiva socialista -que acordó como parte del programa electoral facilitar la financiación de 400.000 viviendas- ni al titular de Economía, Carlos Solchaga, quien advirtió que existían graves dificultades para materializar esa promesa. Txiki Benegas, secretario de Organización del PSOE, emplazó el pasado jueves al jefe del Ejecutivo a que zanjase la polémica y, como secretario general del partido, respaldase el programa electoral. La dirección socialista ya anunció ayer que se sentía satisfecha por la reacción de la presidencia del Gobierno tras la reunión del Consejo de Ministros, que, según uno de sus asistentes, se desarrolló "en un clima de cordialidad" durante las dos horas y media que duró el debate sobre esta cuestión.

A lo largo de esa debate, se estudiaron dos informes -presentados por Solchaga y José Borrell, ministro de Obras Públicas-, en base a los cuales se elaboró una nota de la Presidencia del Gobierno.

En esa nota, difundida tras el Consejo de Ministros, se indica que que el Gobierno ha comenzado a estudiar "la propuesta sobre politica de vivienda compartiendo el carácter prioritarío del problema y la importancla social del mismo". La ministra portavoz, Rosa Conde que leyó el comunicado en la habitual conferencia de prensa tras el Consejo, afirmó que, "a juicio del Gobierno, la oferta de 400.000 viviendas en cuatro años es perfectamente abordable" pero enseguida reconoció que ha habido " un mínimo problema de descoordinación entre el partido y el Gobierno". La nota añade que se ha hecho "una primera reflesión" sobre el plan del PSOE.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sin embargo, a la hora de adoptar las medidas concretas descarta la vía de los coeficoentes obligatorios, propuesta que había sido formulada por alguno de los promotores del plan como Abel Caballero, miembro de la Ejecutiva socialista. En ese terreno, el Ejecutivo sí da la razón a Carlos Solchaga, quien ya advirtió que tal medida iría en contra de las normas de la Comunidad Europea. El comunicado no especifica, una vez descartada esa vía, qué mecanismos de Financiación se utilizarán.

De esta manera, el Gobierno no quiso ayer pillarse los dedos sobre las fórmulas que utilizará para sacar adelante las 400.000 viviendas que propone el PSOE. La ministra reconoció que en este caso había existido "un mínimo problema de descoordinación" y trató de explicarlo de manera que Felipe González no resultase afectado, ni de que quedase la duda de si había sido el causante de esa descoordinación al no haber informado a Carlos Solchaga de lo aprobado por la Ejecutiva del PSOE. Según Rosa Conde, "en la Ejecutiva del partido socialista se hizo un análisis oral y posteriormente el desarrollo de la propuesta ha llegado al Gobierno a lo largo de la semana, de manera que todos los miembros del Gobierno ya conocen la propuesta".

Miembros de la Ejecutiva han comentado que en esa reunión, celebrada el pasado lunes, Felipe González no entró en los pormenores de la financiación del plan, pero sí hizo dos consideraciones. En primer lugar, que se tuviera en cuenta que las medidas a adoptar no debían chocar con la legislación comunitaria, y de otra, que había que considerar que los Presupuestos Generales no sufriesen por esta causa un incremento excesivo de su déficit.

Cuando Benegas aludió como posibilidad la de acudir a los coeficientes para la financiación, no cerró otros caminos, aunque sí afirmó que "el mecanismo de fenanciación de este plan sería deseable que surgiera por acuerdo del sector financiero y el Gobierno de la nación".

La ministra portavoz fue preguntada por otra de las objeciones puestas por Solchaga, cual fue que si se utilizaban los Presupuestos del Estado para esta financiación, habría que quitar de los mismos partidas destinadas a otras parcelas. "No hay que entender negativamente el cambio de prioridades en los Presupuestos", dijo Conde.

"Satisfacción" del partido

La respuesta gubernamental fue conocida inmediatamente en la dirección del PSOE y la reacción fue "de plena satisfacción", según un portavoz oficial, de tal manera que, como estaba previsto, éste será un argumento electoral de primera fila. Desde el PSOE se aseguró que "no habrá una palabra más sobre esta polémica", sino tan sólo que se dejará al Gobierno que busque los mecanismos para que la oferta se plasme en realidad.Sin embargo, ayer mismo, el secretario general de los socialistas andaluces, Carlos Sanjuán, dijo que "Carlos Solchaga se aplique y trabaje, que para eso está ahí puesto y para eso se le paga", según Efe.

La ministra portavoz no quiso dar plazos sino que tan solo enunció "el compromiso del Gobierno para acelerar los trabajos en materia de vivienda que ya estaban comenzados".

[Por otra parte, el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, realizará el próximo día 24 su primer viaje oficial desde que ocupa ese cargo. Serra visitará Extremadura, precisamente la comunidad que su antecesor, Alfonso Guerra, eligió el pasado mes de enero para hacer pública su intención de dimitir].

Más información en la página 43

Sobre la firma

Archivado En