Bush asegura que las tropas destacadas en el Golfo están ya lista para la guerra
AGENCIAS "SI se registrara en los próximo diez minutos una provocación, las tropas de los aliados estarían en condiciones de responder enérgicamente", afirmó ayer el presidente norteamericano, George Bush. Estas declaraciones fueron hechas durante la despedIda del primer ministro británico, John Major, quien, a su vez señaló: "Si [Sadam] se retira de Kuwait no habrá ningún conflicto, pero si no lo hace, conoce las consecuencias".
Major acompañó a Bush en su primera jornada de vacaciones navideñas en Camp David. El aparente clima de normalidad que ha permitido al presidente abandonar tem...
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AGENCIAS "SI se registrara en los próximo diez minutos una provocación, las tropas de los aliados estarían en condiciones de responder enérgicamente", afirmó ayer el presidente norteamericano, George Bush. Estas declaraciones fueron hechas durante la despedIda del primer ministro británico, John Major, quien, a su vez señaló: "Si [Sadam] se retira de Kuwait no habrá ningún conflicto, pero si no lo hace, conoce las consecuencias".
Major acompañó a Bush en su primera jornada de vacaciones navideñas en Camp David. El aparente clima de normalidad que ha permitido al presidente abandonar temporalmente la Casa Blanca contrasta con el pesimismo en Washington sobre las posibilidades de paz.
En otro resonar de tambores de guerra, el secretario norteamericano de Defensa, Richard Cheney, declaró en Arabia Saudí que las fuerzas norteamericanas en la zona del golfo Pérsico estarán listas para el combate poco después del 15 de enero, fecha en que caduca el ultimátum lanzado por la ONU para que Irak se retire de Kuwait.
Cheney declaró el pasado viernes que el presidente iraquí "hace oídos sordos" al ultimátum. Ayer, un alto funcionario del Departamento de Estado insistió en que "a lo que parece, Sadam es la única persona del mundo que no se siente aludida por el mensaje de la ONU".
En una entrevista concedida por George Bush al semanario US News and World Report, el presidente norteamericano afirma que la crisis actual con Irak "no se puede tratar con indecisión, de modo que no puede haber un compromiso. Está muy claro que se trata de una disputa entre el bien y el mal".
Bush se declaró ayer convencido de que Moscú seguirá apoyando la política de Estados Unidos en el Golfo a pesar de la dimisión del ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze.