El último viaje de trabajo a Madrid

El juez Gilles Boulouque estuvo el pasado 3 de diciembre en Madrid para interesarse por tres sumarios referidos a actuaciones del comando itinerante de ETA integrado por ciudadanos franceses. Boulouque, que tenía encomendada en Francia las investigaciones de las actividades que durante 12 años realizaron en territorio español los etarras Jacques Esnal, Jacketx; Frédéric Haramboure, Txistor; Jon Parot, Plillippe Sáez, Jean Pierre Errenundegal y Jean Vincent García, pretendía obtener de los jueces españoles pruebas de los procesos que se siguen en España contra el jefe del c...

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El juez Gilles Boulouque estuvo el pasado 3 de diciembre en Madrid para interesarse por tres sumarios referidos a actuaciones del comando itinerante de ETA integrado por ciudadanos franceses. Boulouque, que tenía encomendada en Francia las investigaciones de las actividades que durante 12 años realizaron en territorio español los etarras Jacques Esnal, Jacketx; Frédéric Haramboure, Txistor; Jon Parot, Plillippe Sáez, Jean Pierre Errenundegal y Jean Vincent García, pretendía obtener de los jueces españoles pruebas de los procesos que se siguen en España contra el jefe del comando, Henri Parot, Unai.Esas pruebas servirían como evidencias en los juicios que se celebrarán en Francia contra los citados terroristas.

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Al llegar a Madrid, el magistrado francés se percató de que uno de los trámites de las comisiones rogatorias francesas no se había efectuado, por lo que su visita, en principio, podría resultar improductiva. Boulouque recurrió al magistrado español Baltasar Garzón, con el que tenía relación por los viajes de éste para interrogar a miembros de la cúpula de ETA detenidos en Francia, para que le ayudase a subsanar el problema. El trámite se solucionó y Boulouque pudo recabar los datos que necesitaba.

El suicidio del juez parisiense causó una honda consternación entre Magistrados y fiscales de la Audiencia Nacional, con los que mantenía frecuentes relaciones de trabajo, informa Julio M. Lázaro.

El juez Baltasar Garzón, uno de los que más contactos mantuvo con Boulouque, remitió un telegrama de pésame al decano de los jueces del Tribunal de Gran Instancia de París en el que lamentaba "la pérdida de un amigo y de un jurista que tanto había hecho por la lucha contra el terrorismo". Garzón destacaba también las buenas relaciones que Boulouque "ha promovido y conseguido entre la justicia francesa y española".

Otro de los jueces centrales de instrucción, Carlos Dívar, definió a Boulouque como una persona "amable, razonable y bondadosa" y como "el mejor colaborador en temas judiciales entre España y Francia". "Tenía un conocimiento exacto de la situación del terrorismo en nuestro país", añadió.

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