El PSOE fuerza el consenso político para hacer frente a las críticas del Poder Judicial

El PSOE trató ayer de forzar con el PP y otros grupos de la oposición un pacto político para compensar las críticas judiciales a la negociación de los 20 vocales del nuevo Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) -el saliente debía cesar ayer- que serán elegidos por el Parlamento entre el próximo día 29 y el 6 de noviembre. El PSOE intentó que también Izquierda Unida (IU) se sumara al consenso, objetivo que no se cumplió. La iniciativa del PSOE se realizó con discreción para neutralizar los reproches de "espectáculo" hacia la negociación, en especial sobre el futuro presidente.

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El PSOE trató ayer de forzar con el PP y otros grupos de la oposición un pacto político para compensar las críticas judiciales a la negociación de los 20 vocales del nuevo Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) -el saliente debía cesar ayer- que serán elegidos por el Parlamento entre el próximo día 29 y el 6 de noviembre. El PSOE intentó que también Izquierda Unida (IU) se sumara al consenso, objetivo que no se cumplió. La iniciativa del PSOE se realizó con discreción para neutralizar los reproches de "espectáculo" hacia la negociación, en especial sobre el futuro presidente.

El portavoz del PP, Rodrigo Rato, aprovechó las críticas a la negociación para atribuirlas al sistema de elección parlamentaria de los 12 vocales de origen judicial, que inicialmente eran elegidos entre los propios jueces y magistrados. Los portavoces de los grupos pertenecientes al llamado bloque constitucional -CDS, CiU y PNV y en especial el centrista Alejandro Rebollo recordaron sus propuestas para modificar el actual sistema. Sólo el de Izquierda Unida (IU) Nicolás Sartorius, aceptó las críticas al "espectáculo" de la negociación, pero mostró su desacuerdo con que se cuestione el sistema parlamentario de elección.En contraste con esta actitud, el pacto político a punto de cerrarse entre el PP y el bloque constitucional dejará fuera a los dos candidatos propuestos por IU -la juez Manuela Carmena y el fiscal José María Mena-, que, según Sartorius, "han sido muy bien recibidos en muchos ambientes de la judicatura" y "no corresponden a criterios partidistas, sino a sensibilidades claras que existen en los ambientes jurídicos de nuestro país". Fuentes parlamentarias socialistas no oficiales informaron ayer que el PSOE realizaba gestiones de última hora para integrar a IU al pacto, a fin de contrarrestar las críticas procedentes de sectores jurídicos progresistas.

Entres éstas, destaca la de Claudio Movilla, dirigente de la asociación progresista y minoritaria Jueces para la Democracia y uno de los interlocutores de los grupos parlamentarios durante la negociación. Movilla criticó el "espectáculo" que se está produciendo y el hecho de que "se esté negociando un Consejo con el sólo criterio de excluir a Clemente Auger como candidato a presidente y sin ofrecer explicaciones al veto". Movilla estimó conveniente que dado que, por primera vez, el CGPJ no se ha podido renovar al culminar su mandato, "debe abrirse", dijo, "un período de reflexión para evitar la deslegitimación del nuevo Consejo". En cambio, Ramón Rodríguez Arribas, presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), mayoritaria y conservadora y otro de los interlocutores de los grupos parlamentario, señaló ayer que "de cara a esta elección, se ha recorrido ya tanto camino que no veo posible enmienda".

La lista de Fraga

En cuanto a los componentes de las candidaturas, el presidente de la APM aseguró que ninguno de los propuestos por

su asociación había recibido comunicación de ningún grupo parlamentario, a pesar de que parece necesario que un número suficiente de asociados formen parte del futuro Consejo. Fuentes socialistas relacionaron la reducción del número de candidatos de la APM con la incorporación a la relación de candidatos manejada por el PP de una lista de juristas enviada por Manuel Fraga, fundador del partido y actual presidente de la Xunta de Galicia. Según tales fuentes, la lista de Fraga es una de las razones de que el PP pidiera al PSOE el aumento de su cuota de candidatos, inicialmente fijada en 5.

Ante las críticas suscitadas por las cuotas de cada partido, los negociadores proyectan presentar a las mesas del Congreso y el Senado una lista conjunta de 20 candidatos capaces de obtener los tres quintos de votos necesarios en cada Cámara, quórum especialmente dificil de lograr en el Congreso, ya que son necesarios 210 votos y el PSOE sólo cuenta con 175 diputados. Los votos del CDS y las minorías nacionalistas bastarían para completar el mínimo exigido, si bien el PSOE estima que el PP votará la lista conjunta, mientras que IU quedará excluida.

La cuota del PSOE

En todo caso, el PSOE mantiene en principio su cuota de 11 candidatos. Para el grupo de 12 jueces y magistrados, el PSOE propone a Juan Antonio Xiol, Eligio Hernández, Ignacio Sierra, Julián Pérez Templado, Rafael Fernández Montalvo y Juan Alberto Belloch. Para el turno de 8 juristas, el PSOE propone a los siguientes: el fiscal Fernando Jiménez Lablanca, el catedrático de Derecho Penal Tomás Salvador Vives Antón, la secretaria judicial María Teresa Fernández de la Vega y los abogados Soledad Mestre y Francisco Navarrete. A pesar del criterio inícialmente favorable a incluir, un procurador de los tribunales, está por el momento excluido José Luis Granizó, por su posición favorable a votar como presidente a Clemente Auger, según fuentes oficiosas del PSOE.