Comercializado un condón para mujer, o 'femidón'

Un preservativo para uso femenino ha iniciado su comercialización en algunos países, entre ellos Estados Unidos y Gran Bretaña. Se trata de un condón que se adapta a la vagina y que se presenta como un método anticonceptivo de barrera de uso más fácil y seguro que el diafragma. "La ventaja del condón femenino es que la mujer puede disponer de un nuevo método tan eficaz y seguro como el preservativo masculino, sin depender de la voluntad de otra persona", explica el ginecólogo Lluis Iglesias Cortit, miembro de la junta de la Sociedad Europea de Contracepción, en cuyo último congreso, celeb...

Un preservativo para uso femenino ha iniciado su comercialización en algunos países, entre ellos Estados Unidos y Gran Bretaña. Se trata de un condón que se adapta a la vagina y que se presenta como un método anticonceptivo de barrera de uso más fácil y seguro que el diafragma. "La ventaja del condón femenino es que la mujer puede disponer de un nuevo método tan eficaz y seguro como el preservativo masculino, sin depender de la voluntad de otra persona", explica el ginecólogo Lluis Iglesias Cortit, miembro de la junta de la Sociedad Europea de Contracepción, en cuyo último congreso, celebrado en mayo pasado en París, fue presentado este nuevo preservativo.

El femishield (escudo femenino), también denominado femidón, es un condón que se adapta a la forma de la vagina y dispone de una especie de arandela flexible que lo mantiene tenso y sujeto a las paredes vaginales. Su diámetro es mayor que el de la vagina, precisamente para facilitar la adaptación, y también su longitud -185 y 160 milímetros en los modelos fabricados hasta ahora- para permitir la cobertura de un radio de seguridad exterior, de varios centímetros alrededor de la vulva, en que el condón queda sujeto mediante una nueva arandela flexible.

De poliuretano

Está fabricado con material plástico, concretamente poliuretano de alto peso molecular y nula porosidad, por lo que resulta absolutamente impermeable. El riesgo de rotura por tensión es algo mayor que en el preservativo masculino, fabricado con látex, no porque el rmiterial sea menos resistente, sino porque está fabricado mediante la sutura de dos piezas.La gran ventaja del condón femenino respecto del diafragma es que, como el condón masculino, impide el contacto directo de la piel y constituye, en consecuencia, un método de barrera eficaz para evitar el contagio del sida. Entre las mujeres relacionadas con la prostitución, que precisan un método de contracepción que las proteja además contra las enfermedades de transmisión sexual, la aceptación ha sido muy buena.