La crisis del Golfo mejorará la balanza comercial de América Latina

El panorama recesivo que caracterizó a Latinoamérica durante la década de los ochenta persi stirá en 1990, año en que el producto de esta región caerá un 1 %, según estimó un informe de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL). Por persona, la disminución del producto en 1990 alcanzará al 3%: el producto interno bruto (PIB) de América Latina de este año será más de 10 puntos inferior al que había una década atrás.La crisis del golfo Pérsico tendrá un impacto favorable global en la balanza comercial de América Latina, cuyo superávit será de unos 2...

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El panorama recesivo que caracterizó a Latinoamérica durante la década de los ochenta persi stirá en 1990, año en que el producto de esta región caerá un 1 %, según estimó un informe de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL). Por persona, la disminución del producto en 1990 alcanzará al 3%: el producto interno bruto (PIB) de América Latina de este año será más de 10 puntos inferior al que había una década atrás.La crisis del golfo Pérsico tendrá un impacto favorable global en la balanza comercial de América Latina, cuyo superávit será de unos 26.000 millones de dólares en 1990. El conjunto de la región tendrá 3.000 millones de dólares de nuevos ingresos por el aumento del precio y del volumen de las exportaciones de petróleo, mientras las importaciones del crudo aumentarán en 1.000 millones de dólares.

Venezuela será el país latinoamericano más beneficiado por los nuevos ingresos que dejará el petróleo. En cambio, Brasil, Chile y los países centroamericanos soportarán los mayores costos.

Según el informe de la CEPAL, la transferencia de recursos al exterior que hace Latinoamérica, debido especialmente al pago de intereses de su deuda externa, absorberá la mayor parte del superávit comercial de los países de la región.

Incremento de la deuda externa

América Latina, pese al esfuerzo de ajuste externo que ha realizado, tendrá por tercer año consecutivo una caída en su producto por persona. La deuda externa latinoamericana, que ascendía a 408.000 millones de dólares a fines de 1989, se incrementará en un 1% durante 1990, estimó la CEPAL.

La CEPAL sintetiza en una estadística el coste social de la prolongada crisis que ha vivido América Latina: el consumo por habitante ha caído un 13% respecto de 1980. Esta disminución, sin embargo, "no refleja cabalmente el deterioro de las condiciones de vida de amplios grupos de la población", agrega el Panorama económico de América Latina 1990.

El informe reseña, entre los factores positivos, la contención de las elevadas tasas de inflación. Los desbordes inflacionarios o el peligro de su rebrote ha sido la preocupación fundamental de los gobiernos de los países latinoamericanos en materia económica.

Argentina, Brasil, Nicaragua y Perú rozaron la hiperinflación en los primeros meses del año y ahora ejecutan programas de contención, al igual que Uruguay. Las políticas anlinflacionarias puestas en vigor en la región buscan reducir o contener el déficit fiscal. "Los ajustes fiscales están adquiriendo proporciones sin precedentes y se han resentido la producción y el empleo", añade el Panorama económico.

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