50 chabolistas de Aranjuez serán instalados en caravanas

Unas 50 personas de raza gitana, en su mayoría niños, van a ser instalados de forma provisional en caravanas aparcadas en un paraje controlado entre Aranjuez y Ontígola (Toledo). Estas familias viven actualmente en chabolas en la zona conocida como Las Cañas, desde que fueron desalojadas, hace ahora un año, de la Casa Negra.

El realojo de estas familias, negociado ya con el Ayuntamiento, se llevará a cabo antes de finalizar el mes. El traslado era necesario por cuanto en el solar que actualmente ocupan van a comenzar las obras de construcción del colegio público San José de Calasanz, as...

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Unas 50 personas de raza gitana, en su mayoría niños, van a ser instalados de forma provisional en caravanas aparcadas en un paraje controlado entre Aranjuez y Ontígola (Toledo). Estas familias viven actualmente en chabolas en la zona conocida como Las Cañas, desde que fueron desalojadas, hace ahora un año, de la Casa Negra.

El realojo de estas familias, negociado ya con el Ayuntamiento, se llevará a cabo antes de finalizar el mes. El traslado era necesario por cuanto en el solar que actualmente ocupan van a comenzar las obras de construcción del colegio público San José de Calasanz, así como los trabajos de acondicionamiento de diversos bloques de viviendas sociales.El estudio sobre las condiciones de vida y necesidades del grupo de población marginal localizado en Las Cañas indica que su modo de vida es la venta de chatarra. La mayoría son analfabetos y carecen de carné de conducir. Ante estos datos, y según reconocían fuentes municipales, se tiene previsto escolarizar el próximo curso a los menores, ayudar a los que lo deseen a obtener el carné de conducir y dotarles, más adelante, de una vivienda.

En cuanto al otro grupo de población marginal que salió de la Casa Negra para establecerse en las viviendas en desuso de la antigua fábrica azucarera, situada en el camino del cementerio, no se ha realizado ningún estudio y se desconoce oficialmente el número de familias que lo compone y su ocupación. Determinadas personas de las que viven en la azucarera tienen antecedentes policiales, así como algunos de los que residen en Las Cañas, como han confirmado desde la comisaría de Aranjuez.

Delincuencia

Con el realojo se pretende la progresiva integración de estos grupos marginales. Las estadísticas del Cuerpo Nacional de Policía indican que el aumento de detenidos por robo y pequeño tráfico de estupefacientes en esta zona durante los dos últimos años coincide precisamente con la ocupación ilegal de la Casa Negra, en la que se instaló un número indeterminado de personas provenientes en muchos de los casos de fuera de Aranjuez. También han aumentado los accidentes protagonizados por conductores sin documentación. Estos hechos están provocando un descontento que hace temer en círculos policiales y vecinales la aparición de conatos de violencia.

Los concejales de Izquierda Unida han denunciado públicamente en distintas ocasiones los problemas de seguridad ciudadana que se vienen originando en la localidad desde hace unos años por el mantenimiento en algunas zonas de guetos formados por grupos marginales.

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Este grupo de concejales ha pedido la integración de esas personas "para que tengan los mismos derechos y obligaciones que el resto de los vecinos y no mayores privilegios". Así se refieren, entre otras, "a la permisividad que parecen tener para circular sin permiso de conducir y para no escolarizar a sus hijos".

Por ello, este grupo ha solicitado reiteradamente del equipo de gobierno socialista la integración de estos grupos, comenzando por la solicitud de residencia en esta localidad para los que no están empadronados.

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