ITALIA 90

Algunos italianos piden venganza por lo de Heysel en las paredes de Turín

La aparición de pintadas en las calles de Turín contra los aficionados ingleses ha disparado la alarma de las autoridades de la ciudad. Turín será escenario, el próximo martes, de una de las semifinales. Si Inglaterra vence mañana a Camerún, trasladaría a esa ciudad a todos sus hooligans."Temblad, hooligans. No olvidamos Heysel" es la pintada más amenazadora que figura en las calles de Turín y la que ha puesto en marcha un dispositivo de seguridad incluso superior al de Cagliari.

Y es que Turín es una ciudad muy sensibilizada con el fenómeno de los hooligans, despué...

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La aparición de pintadas en las calles de Turín contra los aficionados ingleses ha disparado la alarma de las autoridades de la ciudad. Turín será escenario, el próximo martes, de una de las semifinales. Si Inglaterra vence mañana a Camerún, trasladaría a esa ciudad a todos sus hooligans."Temblad, hooligans. No olvidamos Heysel" es la pintada más amenazadora que figura en las calles de Turín y la que ha puesto en marcha un dispositivo de seguridad incluso superior al de Cagliari.

Y es que Turín es una ciudad muy sensibilizada con el fenómeno de los hooligans, después de vivir intensamente la tragedia del estadio Heysel, de Bruselas, donde el Liverpool y el Juventus disputaron la final de la Copa de Europa en 1985, donde fallecieron 39 hinchas, la mayoría de ellos Italianos. Y, por si eso fuera poco, los ciudadanos turineses también recuerdan los incidentes que se produjeron en la Eurocopa de 1980, minutos después de concluir el encuentro Bélgica-Inglaterra.

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Glenn Kirton, responsable de las relaciones externas de la federación inglesa, mostró ayer su satisfacción por el trato que estaban recibiendo en Italia: "Los organizadores nos están tratando de maravilla. Pienso que la prensa ha exagerado los incidentes y que las autoridades futbolísticas están satisfechas de nuestro comportamiento. Creo que merecemos volver a las competiciones europeas y, si la UEFA nos da el visto bueno, habremos demostrado a todo el mundo que sólo se trataba de un problema de doscientos imbéciles".

De momento, y a la espera del resultado del partido Inglaterra-Camerún, las autoridades de Turín ya tienen previsto recibir refuerzos policiales de Cagliari, que cuentan con la experiencia de haber convivido con los hinchas ingleses durante la primera fase del Mundial. También se ha previsto el lugar de concentración de la selección inglesa, que será el hotel Hasta, en Asti. Todas estas medidas se completan con un control férreo en las calles de la ciudad y la protección de los monumentos.

Entre los comerciantes turineses reina el temor a la invasión. De ahí que Francesco Esposito, presidente de la asociación, no haya tenido reparos en admitir: "Esperamos y deseamos que gane Camerún. No queremos ver en nuestra ciudad a los ingleses".

Del sentimiento anti-hooligans quiere aprovecharse Camerún. Los dirigentes de la selección revelación del Mundial han utilizado al técnico soviético Valery Nepomniaschi para que hiciera un llamamiento a los ciudadanos de Nápoles con el fin de que mañana acudan al estadio y les den su apoyo. "Los ingleses son antipáticos. Tenéis que estar con nosotros", ha dicho Nepomniaschi.

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