Cartas al director

Mensajes contradictorios

El pasado 4 de mayo visité la Expo Ocio para obtener cierta información que me interesaba. Cubierto por este objetivo, decidí darme una vuelta por el recinto ferial. Entre los espacios ocupados por los expositores de vehículos encontré un puesto del MOPU. Mi formación profesional, que no mi deformación, me llevó a su interior. Allí pude ver el Plan de Accesos a Madrid en planos y maquetas, junto con gráficos y fotografías de otras realizaciones del citado ministerio. Destacaban los espacios dedicados a las denominadas áreas de descanso, que se están construyendo en las carreteras y auto...

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El pasado 4 de mayo visité la Expo Ocio para obtener cierta información que me interesaba. Cubierto por este objetivo, decidí darme una vuelta por el recinto ferial. Entre los espacios ocupados por los expositores de vehículos encontré un puesto del MOPU. Mi formación profesional, que no mi deformación, me llevó a su interior. Allí pude ver el Plan de Accesos a Madrid en planos y maquetas, junto con gráficos y fotografías de otras realizaciones del citado ministerio. Destacaban los espacios dedicados a las denominadas áreas de descanso, que se están construyendo en las carreteras y autovías más transitadas por vehículos que presumiblemente hacen largos recorridos, portugueses y norteafricanos que van y vienen de sus países de origen a Centroeuropa, particularmente. Pude ver planos, modelos del mobiliario, indicación de los servicios y facilidades ofrecidas a los viajeros, etcétera. Bien, muy bien, hasta aquí, muy bien. Pero cuando me disponía a abandonar el puesto vi con asombro una fotografía mural de una de esas áreas de descanso en la que se veía a un hombre y a una mujer sentados en una de las rústicas mesas que amueblaban la zona, cerca de su coche, furgoneta de color rojo en este caso, si mi memoria visual no me falla, disponiéndose a reponer fuerzas con la ingestión de algo de comida. ¿Qué fue lo que llamó mi atención? Sencillamente que el automovilista tenía en la mano una botella de vino tinto, que sin duda y por lo menos pensaba probar. ¿Qué mensaje trata de transmitir esta foto? ¿Querrá decir que hacemos unas áreas de descanso tan buenas que apetece disfrutarlas con unos buenos chatos? Tal vez yo sea muy retorcido y la realidad sea otra. Tal vez el contenido de la botella sea un refresco de color oscuro. Tal vez la que conduzca a partir de ese descanso sea ella. Tal vez piensan dormir allí hasta el día siguiente. En cualquier caso, creo que esta foto está en clara oposición a ese consejo que, a fuerza de repetirlo, parece estar entrando en nuestras mentes: "Si bebes, no conduzcas, y si conduces, no bebas". Considero, pues, que la exhibición de la citada fotografía cuando menos ha sido muy desafortunada.Por ello, señor ministro de Obras Públicas, señor responsable de las exposiciones del MOPU, señor comisario de la Expo Ocio, permítanme que no les felicite.-

doctor ingeniero de Caminos, Canales y Puertos.

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