Despliegue de información religiosa en Praga ante la visita del Papa
ENVIADO ESPECIALLos checoslovacos esperan hoy al papa Juan Pablo II entre incrédulos y gozosos. La gente subrayaba ayer en la calle con orgullo, lo mismo que toda la Prensa nacional, que desde hacía 40 años "no se veía nada semejante", refiriéndose a la amplia información religiosa de los diarios, la radio y la televisión.
En una conferencia de prensa celebrada ayer por la mañana, el primer viceministro Joseph Hromadka afirmó que "Cristo se revela cada día más fuerte que cualquier ideología", y añadió que el viaje del Papa abre "un nuevo futuro" al país.
Toda la Prensa, incluida ...
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ENVIADO ESPECIALLos checoslovacos esperan hoy al papa Juan Pablo II entre incrédulos y gozosos. La gente subrayaba ayer en la calle con orgullo, lo mismo que toda la Prensa nacional, que desde hacía 40 años "no se veía nada semejante", refiriéndose a la amplia información religiosa de los diarios, la radio y la televisión.
En una conferencia de prensa celebrada ayer por la mañana, el primer viceministro Joseph Hromadka afirmó que "Cristo se revela cada día más fuerte que cualquier ideología", y añadió que el viaje del Papa abre "un nuevo futuro" al país.
Toda la Prensa, incluida la comunista, salió ayer a la calle con un despliegue de información papal como en ocasiones semejantes en los países occidentales más católicos. Algunos diarios destacaron que esta visita será muy importante, sobre todo para el fortalecimiento de los dos partidos de inspiración cristiana: el Partido Popular y la Democracia Cristiana.
El aparato policial es imponente. Desde ayer a las ocho de la tarde hasta que permanezca el Papa en Praga ha quedado paralizada al tráfico, hasta el punto de que no funcionan ni los taxis. La gente pone de relieve que, desde hacía 40 años, nunca en este país se había podido ver en televisión una misa, como va a suceder esta tarde.
Al mismo tiempo, iban llegando peregrinos polacos, austriacos y húngaros.
Los gastos del viaje serán sufragados conjuntamente por el Estado y por la Iglesia. Ésta última, que no posee bienes en Checoslovaquia, hará una colecta entre los fieles católicos del país para recaudar los fondos necesarios. Y la gente ha aplaudido la iniciativa.