El nuevo código ético médico obliga a interrumpir las huelgas de hambre

El médico está obligado a interrumpir una huelga de hambre o a realizar una transfusión contra la voluntad del paciente si peligra su salud, según el nuevo Código Deontológico de la profesión, presentado ayer por el presidente de la Organización Médica Colegial, Alberto Berguer. El articulado, apenas diferente al redactado hace 11 años, mantiene su oposición a la eutanasia activa, calificada de "homicidio por compasión , y al aborto, aunque no sancionará al médico que decida practicarlo legalmente. Como novedad, admite que en ciertos casos los facultativos podrán vender medicamentos.El nuevo c...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El médico está obligado a interrumpir una huelga de hambre o a realizar una transfusión contra la voluntad del paciente si peligra su salud, según el nuevo Código Deontológico de la profesión, presentado ayer por el presidente de la Organización Médica Colegial, Alberto Berguer. El articulado, apenas diferente al redactado hace 11 años, mantiene su oposición a la eutanasia activa, calificada de "homicidio por compasión , y al aborto, aunque no sancionará al médico que decida practicarlo legalmente. Como novedad, admite que en ciertos casos los facultativos podrán vender medicamentos.El nuevo código ético ha sido elaborado por una comisión especial integrada por cinco presidentes de colegios médicos de España, a partir de un informe de la Comisión Deontológica de la Organización Médica Colegial y de la Guía Médica Europea, y ha sido refrendado por los representantes de todos los colegios.

El presidente de los 130.000 médicos españoles dijo ayer que los casos de huelga de hambre o " ayuno voluntario", como él mismo los denominó, deben ser tratados de forma individual, tras asegurar que ningún preso de los GRAPO fue alimentado contra su voluntad. "Una cosa es la actitud política y otra su comportamiento como pacientes", matizó. "No puede decirse que los grapo actuaran con libertad, ya que, cuando no estaban presionados por sus familiares o abogados, muchos de ellos pidieron que les inyectáramos algo para no morir de inanición", añadió.

La nueva normativa elimina la prohibición de practicar esterilizaciones, pero mantiene su rechazo a la práctica del aborto, en contra de la opinión de más del 50% de los españoles que se vienen declarando partidarios en distintas encuestas. "Los médicos lo tenemos muy claro: la vida humana empieza en el momento en que se fecunda el óvulo", afirmó Berguer.

Página 23

Archivado En