El dólar perderá su papel hegemónico en esta década según el 'guru' Henry Kauffman

Estados Unidos y su divisa, el dólar, perderán en esta década el papel hegemónico que mantenían desde la Segunda Guerra Mundial. En tal afirmación coincidieron ayer el gurú de Wall Street, Henry Kauffman, y el ex primer ministro de Francia Raymond Barre durante un debate sobre perspectivas económicas para los años noventa, dentro del del World Economic Forum, que celebra estos días su reunión anual en Davos (Suiza).

Tanto Kauffman como Barre señalaron que la economía norteamericana registrará en esta década un crecimiento muy lento, "hasta tal punto que sólo la pujanza de Japón y la Com...

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Estados Unidos y su divisa, el dólar, perderán en esta década el papel hegemónico que mantenían desde la Segunda Guerra Mundial. En tal afirmación coincidieron ayer el gurú de Wall Street, Henry Kauffman, y el ex primer ministro de Francia Raymond Barre durante un debate sobre perspectivas económicas para los años noventa, dentro del del World Economic Forum, que celebra estos días su reunión anual en Davos (Suiza).

Tanto Kauffman como Barre señalaron que la economía norteamericana registrará en esta década un crecimiento muy lento, "hasta tal punto que sólo la pujanza de Japón y la Comunidad Europea del mercado único permite pensar que no habrá recesión", según el político y economista francés.Wayne Angell, uno de los gobernadores de la Reserva Federal de Estados Unidos, matizó que el dólar "seguirá siento la principal divisa de intercambio" si se consigue estabilizarlo. Para ello, dijo, "hay que incrementar el ahorro familiar y empresarial, reducir el endeudamiento y mantener una política monetaria restrictiva que lleve a la estabilidad de precios; es decir, a una inflación cercana a cero".

El director del debate, Benjamín Friedman añadió que el presupuesto federal que acaba de presentar el presidente Bush "es muy poco realista" y que los objetivos que se marca "no podrán cumplirse". Barre y Kauffman se mostraron de acuerdo con tal actitud escéptica.

"De momento, por tanto, no parecen muy fundadas las esperanzas de que EE UU logre ese difícil equilibrio entre aterrizaje suave y control total de la inflación", señaló Friedman, quien lanzó además la pregunta de si los japoneses seguirían financiando indefinidamente el déficit estadounidense. "Lo hacen cada vez de peor gana", respondió Kauffman, "pero seguirán con ello mientras mantengan su fuerte superávit. La catástrofe sería que el dólar perdiera su imagen de moneda refugio internacional y Gobiernos y empresas empezaran a sustituir sus reservas en dólares por otra divisa. Eso provocaría una grave depreciación y serios problemas".

Inestabilidad

El gobernador de la Reserva Federal, Wayne Angell, refutó tal posibilidad, afirmando que "las compras de dólares por parte de otros Gobiernos crecen año tras año, y ésa es la principal causa de su inestabilidad". Angell estimó que, a su cambio actual, el dólar "está cerca del punto óptimo para que las empresas norteamericanas sean competitivas y empiecen a corregirse los desequilibrios comerciales".Barre agregó que la reducción de gastos militares y su incidencia en la disminución del déficit fiscal de EE UU reforzaba "las buenas perspectivas que presenta la década".

Kauffman quiso incidir en la incógnita abierta por los países del Este, "cuya transformación económica necesitará de la ayuda de Europa occidental; no hay que despreciar el riesgo de que algunos países del Este alcancen niveles de endeudamiento insoportables y se conviertan para Europa en un problema parecido al que es Latinoamérica para EE UU".

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